La Liga Endesa vive su segunda verano de culebrón. El pasado año el protagonista fue Bilbao Basket, expulsado de la competición y posteriormente readmitido a la fuerza por decisión del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Este curso, le ha tocado el turno al Club Ourense Baloncesto.

El club gallego, que logró el ascenso a la Liga Endesa en la cancha, no obtuvo el visto bueno por parte de la ACB al no superar la auditoria establecida como requisito indispensable por la Asociación de Clubes de Baloncesto. Con el portazo al Ourense, y también por tercera vez al Autocid Burgos, la ACB volvía a invitar a su seno al Gipuzkoa Basket y Montakit Fuenlabrada, clubes que ocuparon las plazas de descenso en la campaña 2014-15.

 El COB no se quedó de brazos cruzados y acudió al TAD, que se declaró incompetente, pasando el caso directamente al Consejo Superior de Deportes (CSD). El club gallego aducía, entre otros argumentos, que si bien presentaba patrimonio neto negativo, la ACB obvió que el propio informe del auditor, indicaba mediante un documento oficial, que la Diputación (que gobierna con mayoría absoluta) aprobaría en el primer pleno tras su constitución la cesión del Paco Paz al COB hasta el año 2070 (como finalmente ha sucedido) lo que hubiese supuesto cumplir formalmente todas las condiciones. Tras una larga y tensa espera, el 11 de agosto el CSD resolvía en favor del COB. 

Con la resolución del CSD encima de la mesa, enmendando la plana a la ACB por segundo verano consecutivo, la "patata caliente" está de nuevo en manos de la Asociación de Clubes de Baloncesto, que debe decidir qué solución darle a este entuerto. Esta solución será tomada ¡20 días! después de la decisión del CSD y previa solicitud de informes a expertos en la materia. 

De forma sucinta, las posibles soluciones son tres:

  • Considerar que la ACB no está obligada a admitir de forma inmediata en su seno al COB tras la resolución del CSD. Interpretación que considera que la resolución del CSD no conmina a inscribir al COB en ACB, sino que solamente declara que a 30 de junio el club gallego no está incurso en causa de disolución. Esta decisión supondría contradecir a este Organismo Autónomo de la Administración General del Estado y dependiente del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Es decir, entrar aparentemente en conflicto con el gobierno español. De esta forma, la Liga Endesa 2015-16 contaría con 18 equipos, incluyendo al Montakit Fuenlabrada,
  • Readmitir a Club Ourense Baloncesto de forma inmediata y anular la invitación realizada a Montakit Fuenlabrada. Desde un punto de vista estrictamente jurídico, esta decisión sería la que más se ajusta a derecho, ya que desaparece la circunstancia que ha dado lugar al acto de invitación para participar en la Liga 2015-16 a Montakit Fuenlabrada. En este caso, la próxima campaña la Liga Endesa contaría con 18 equipos, incluyendo al COB, pero sin el conjunto fuenlabreño.
  • Readmisión inmediata del Club Ourense Baloncesto, manteniendo el pie la invitación realizada al Montakit Fuenlabrada. La decisión más salomónica, que, por una parte, respetaría la resolución dictada por el CSD y, por otra, no afectaría a los intereses de un Montakit Fuenlabrada que ya está preparando el próximo curso como equipo ACB y que podría emprender inmediatamente acciones contra la ACB por los perjuicios causados. Estaríamos ante una liga de 19, con problemas de calendario. El posicionamiento favorable a esta opción en el seno de la ACB es claramente minoritario. 

En cualquiera de los casos, el mal al basket ACB ya está hecho. No habrá solución pacífica, ni ideal. Por segundo año consecutivo, se instala la inseguridad jurídica, los pleitos y el conflicto en el máximo exponente del basket español por clubes. Una imagen cada vez más dañada y que será complicado de restaurar.