En esta situación hay un claro precedente y en el mismo club. Hace unas temporadas, el Real Madrid incorporó a jóvenes jugadores de contrastada calidad de origen balcánico. Uno de ellos fue Nikola Mirotic, procedente de la prestigiosa Joker School Pogdorica. Con su progresión, es uno de los mejores jugadores de la Liga Endesa y de la Euroliga.

El hispano montenegrino, destacó en las categorías inferiores del club blanco, especialmente en el Circuito Sub20 y en el NIJT Ciutat de l’Hospitalet, formando parte del equipo júnior y logrando 2 nominaciones consecutivas al mejor jugador del torneo. Después, fue cedido a equipos de división superior para continuar con su progresión como el Palencia en Leb Oro. Meses después llegó al primer equipo y de forma paulatina se asentó definitivamente como una referencia a tener en cuenta. Siendo a día de hoy uno de los líderes del equipo que mejor espectáculo ofrece en el viejo continente.

Un ejemplo de formar un talento, prepararlo para la élite, curtirlo a nivel profesional y finalmente estar  entre los mejores después de un largo periodo de adaptación. La guinda, fue la nacionalización española, jugando el Europeo U18 en Croacia (bronce) y finalmente el U20 en Bilbao, logrando la medalla de oro y el MVP del torneo continental.

En la capital, viendo lo que pasó con el ala-pívot, quisieron apostar por otra joven promesa foránea. Es el caso del esloveno Luka Doncic, pretendido por los grandes de Europa antes de llegar al Real Madrid. Con FC Barcelona y Baskonia especialmente como equipos más interesados en contar con sus servicios. Finalmente, el proyecto blanco atrajo más a la familia y al propio jugador. Su padre es el ex jugador Sasa Doncic. En dos temporadas, su juego ha maravillado en todo evento en el que los madrileños han participado. Demostrando una técnica individual inusitada a su edad. Día a día, sigue creciendo. Por eso se quiere cuidar la evolución del joven, repitiendo el acertado proceso que tuvo Mirotic.

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Luka Doncic, la sensación blanca en sus categorías inferiores / BasketcanteraTV

Todo este excelente rendimiento no ha pasado desapercibido en los medios de comunicación. Pero en breve Luka tendrá que decidir con qué país jugará los torneos a nivel internacional. Y ahí está el dilema. El alero, nacido en Eslovenia, se muestra muy identificado con su país de nacimiento, pero a la vez está a gusto y bien tratado en España. Las dudas surgieron la semana pasada, cuando medios balcánicos informaban del posible interés de la FEB en nacionalizar a Doncic. En Eslovenia poco tardaron en reaccionar y en condenar tal intención.

Había que escuchar a todas las partes implicadas para sacar una conclusión. El Real Madrid desmiente cualquier tipo de información acerca de la posible nacionalidad española del jugador, dejando clara la intención del chico de jugar con el combinado nacional esloveno. Por otra parte, desde la FEB desconocen cualquier información al respecto. Alabando eso sí la calidad del jugador nacido en Ljublajna hace 13 años. Para acabar, el entorno cercano al jugador declara la fácil adaptación que tuvo Luka en la capital, aparte de su identificación con el país balcánico.

Habrá que esperar al desenlace final antes del próximo verano, pero las cartas están sobre la mesa. El enigma Doncic sigue su curso a la espera del próximo capítulo. Mientras tanto, el Real Madrid sigue logrando triunfos con la ayuda de un jugador que puede llegar muy alto en el futuro. El jugador ha tomado la decisión y se la ha comunicado a gente de su entorno. 

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