El domingo puso el broche a una semana grande en el baloncesto europeo,con la celebración de las finales de copa en los países más potentes de este deporte. España, Francia, Italia, Turquía y, cómo no, Grecia.

En territorio heleno la final de la copa no tuvo demasiadas sorpresas, con la disputa por el título entre los dos gigantes del país: Olympiacos y Panathinaikos. Dos equipos que protagonizan una de las mayores rivalidades en el baloncesto continental y en la que se dispara la tensión en cada ocasión que coinciden.

OLYMPIACOS SE LLEVA LA COPA griega ANTE PANATHINAIKOS

Olympiacos fue el equipo ganador esta vez. Los de Giorgos Bartzokas pasaron por encima del conjunto de Ergin Ataman -quien tuvo la posibilidad de ganar su primer título de verde- después de caer en los dos partidos anteriores ante Panathinaikos. Después del partido, el técnico de El Pireo admitió estar muy satisfecho por la consecución de la Copa y por la convivencia de los aficionados de los dos equipos, aunque expresó algunas preocupaciones al respecto.

“Fue un partido con mucha intensidad por parte de ambos equipos. Nuestra defensa fue como siempre muy sólida, concediendo sólo 58 puntos y limitando a un equipo con el talento ofensivo del Panathinaikos, que demuestra compromiso y clase. Nosotros planificamos, pero los jugadores son los que ejecutan, juegan para ellos, pero también para la camiseta y el club que representan. Esa es la mayor bendición para un entrenador, tenemos suerte de tener estos jugadores”, dijo Bartzokas.
 
A pesar del pésimo acierto desde el perímetro, Olympiacos manejó la situación desde la defensa para controlar el partido. “Hicimos un 1/16 en triples y estábamos en +4. Tuvimos 13 asistencias en la primera parte con 1/14 en tiros. Dijimos en el descanso que si seguíamos jugando bien y tirando con confianza, ganaríamos. Jugadores como Canaan y Peters acertaban algunos tiros y, una vez que lo hacían, se abría la diferencia”, explicó.

BARTZOKAS, HARTO DE LOS ATAQUES DE GIANNAKOPULOS

Bartzokas no dudó en afirmar que siente el apoyo de su entorno, recalcó el comportamiento de ambas aficiones durante el domingo y agradció la confianza en el equipo, pero tenía un mensaje indirecto para una persona en concreto: “No sentimos que tengamos ninguna duda. Todos los que nos rodean son cuestionados, en todos los trabajos. En el camino me dicen ‘agárrate que estamos contigo’, para que no me sienta solo. Siento el apoyo del equipo y de la gente. No sentimos ningún desafío, al menos por parte de aquellos que importan. Ahora bien, si algunas personas están trolleando…

Y esa persona no es nada menos que Dimitris Giannakopoulos. El presidente más polémico de la Euroliga y que deja auténticas excentricidades cada año. “El baloncesto griego da pasos en adelante, pero el presidente de un equipo contrario me ataca constantemente en las redes sociales y nunca puedo responderle a un presidente, estos son detalles importantes para que exista la civilización. El hecho de que hubiera mucha gente, incluso aficionados de ambos equipos, que los equipos coincidieran en los árbitros y viésemos un buen arbitraje, es un paso adelante”, dijo.
 
A mediados de enero ya pudimos ver, como previa del derbi griego en temporada regular liguera, que Giannakopoulos dejaba un mensaje a sus aficionados. Siendo susceptible de que el arbitraje y Olympiacos tenían un “plan” para echar a perder tal partido, se pronunció en redes sociales con acusaciones directas: “El plan del Olympiacos, sobre todo ahora que se ha hecho el sorteo arbitral y ha entrado Tsarouha, es intentar crear un problema, interrumpir el partido debido a la gente que está sentada al lado de la cancha”.