Además del gran momento de forma del Barça Basket, hay otra noticia destacada en la Euroliga. Dos de los equipos que ocupan las primeras posiciones de la clasificación proceden de la Eurocup. Maccabi Tel Aviv y Valencia Basket están sorprendiendo a todos: los israelíes por su solidez competitiva y los valencianos por un descaro que los ha colocado en boca de todos. Hapoel tiene ambición de dar un paso adelante y ya ha hecho oficial una renovación clave en la columna vertebral del proyecto.

Elijah Bryant y Antonio Blakeney: secundarios de élite para Micic

Hapoel ha encontrado en Elijah Bryant al hombre clave de su ofensiva en este inicio de temporada. Anota, genera juego y ejerce como líder mientras se espera que el fichaje mediático, Vasilije Micic, llegue en modo killer al tramo decisivo del curso. Bryant ha caído de pie en el proyecto israelí: esta temporada en la Euroliga 2025-26 promedia 14,6 puntos, 5,9 rebotes y 3,1 asistencias, con un índice de valoración cercano a 19,7. Su impacto apunta claramente a una extensión de contrato que parece cuestión de tiempo.

Otro jugador fundamental para explicar el liderato en solitario de Hapoel es Antonio Blakeney. Con 14,1 puntos, 1,9 rebotes y 1,0 asistencia por partido, y una valoración media de 11,9, Blakeney aporta continuidad ofensiva y amenaza exterior. Al igual que Bryant, todo indica que su renovación está encaminada.

A la espera del emblema de Hapoel: un proyecto al que le ha llegado su momento

Con estas decisiones, Hapoel se asegura que sus dos máximos anotadores sean hombres de proyecto y no busquen una salida para asumir un rol más protagonista en otro contexto. Porque, si algo puede hacer pinchar el globo en Tel Aviv, es precisamente la pérdida de equilibrio interno. Dimitris Itoudis ha construido un bloque sólido y coral, pero surge una duda legítima: ¿es este modelo sostenible si Micic continúa rindiendo a medio gas, o el técnico griego modificará el plan cuando avance la temporada y su estrella asuma mayor peso?

De momento, Hapoel es líder de la Euroliga, y nada hace pensar que vaya a sufrir para meterse en playoffs sin pasar por el play-in. Además, el regreso a Israel supone un impulso anímico para un proyecto que ha sobrevivido a su penitencia en la Eurocup y a jugar lejos de casa, para volver entre los mejores, sorprender y, por qué no, soñar con algo grande.