Todavía con Lagun Aro le abrió las puertas y tras recibir la invitación formal de la Euroliga y un periodo de reflexión, ha decidido aceptarla.
Con sólo dos refuerzos firmados, el exterior Bradley Buckman, el club sevillano ya se disponía a cerrar la plantilla con la firma de un base/escolta que acompañe a Tomas Satoransky en la dirección y con el ascenso al primer equipo de dos canteranos que ya se habían dejado ver en la ACB mientras compaginan su trabajo en el equipo EBA: Ondrej Balvin y Beka Burjanadze. El primero completaría el juego interior con Triguero además de Buckman y Bogdanovic en el puesto de 4, mientras que el segundo se une a una línea exterior que no termina de quedar clara. Mientras ha sonado con fuerza la posible incorporación de Heurtel mediante una cesión, según Diario de Sevilla podrían haber cambiado los planes para buscar un tirador y aprovechar la polivalencia de Tepic para la dirección. En cualquier caso, el paso adelante de los canteranos parece seguro, y esta campaña cobrarán más protagonismo.
Así, el Cajasol de Aíto García Reneses vuelve a una competición en la que terminó como subcampeón hace dos años y que su actual entrenador conquistó en 2006 con el Joventut. La noticia ha traído desde que llegara la invitación al club reacciones dispares: si bien es un aliciente añadido para una temporada marcada por la necesidad de darse a valer, además de una forma de estimular el fogueo de los más jóvenes, hay que contar con el probable desgaste que trae consigo disputar dos competiciones frente a una plantilla completada con la cantera. Eso sí, en el caso de conquistar el título que ya se les escapó en 2011, conseguir un billete para la Euroliga podría antojarse vital para sus planes futuros. En la segunda competición europea coincidirá con Valencia Basket y Gescrap Bizkaia, además de otros equipos bastante competitivos, por lo que podrían cambiar los planes preparados para su plantilla 2012-13.