Partido de Euroliga en estado puro el vivido esta noche en el Palau Blaugrana entre dos de los mejores equipos recientes de Europa y dos aspirantes al título (78-69). Los azulgrana han vuelto a dar muestras de autoridad y de que su proceso de crecimiento y acoplamiento de sus nuevos jugadores va por buen camino.
Los primeros compases del encuentro han sido muy igualados con los dos equipos sin ajustar sus mecanismos defensivos y anotando con cierta comodidad. Ha sido en estos minutos de tanteo donde hemos podido saborear un duelo entre interiores de muchos quilates. El intercambio de golpes entre Ante Tomic y Esteban Batista ha sido fantástico. EL croata con su juego de pies y sus finalizaciones cerca del aro de manual con ambas manos rivalizaba con las buenas acciones del uruguayo y sus movimientos característicos de pivotaje y fintas. Tomic llegaría al descanso con 12 puntos y 4 rebotes (16 de valoración) y Batista con 10 y 5 (14 de valoración).
Empezaría el segundo cuarto por los mismos derroteros y con empate a 18 en el marcador. Los protagonistas volvían a ser los jugadores interiores de ambos equipos. James Gist se echaba su equipo a la espalda y con acciones de mucho mérito superaba una y otra vez a Nachbar tanto jugando de cara a canasta, como de espaldas y atacando el rebote ofensivo. Su tapón a Oleson a la altura del aro ha sido además una delicatessen. Por contra, Lampe ofrecía unos buenos minutos a su equipo, seleccionando bien sus tiros (acabaría con 12 puntos y 14 de valoración) y Doellman abriendo este último la primera brecha del partido (41-33 a 3 minutos para el descanso). Navarro cerraría la primera parte con un triple marca de la casa (47-38).
En la reanudación, el Barcelona se ha dedicado a gestionar la ventaja ganada y a aprovecharse del nefasto porcentaje en lanzamiento exterior del equipo de Dusko Ivanovic (2/20 en triples a lo largo del partido) y del olvido en el banquillo de su mejor jugador del primer tiempo: Gist.
El momento clave del partido ha llegado con la expulsión de Abrines por dos faltas técnicas y con 6 minutos aun por jugarse. Panathinaikos se ha acercado hasta el 67-62. En ese momento el Palau, un tanto dormido hasta entonces, ha rugido como en las grandes ocasiones empujando a su equipo a la victoria final (78-69). Ante Tomic con 16 puntos (8/8 en T2), 10 rebotes para 29 de valoración y buenas ayudas defensivas también ha tenido algo que ver.