Partido decisivo de la eliminatoria de cuartos de final de la Eurocup. Quien perdiese, se iba a casa y, teniendo en cuenta las aspiraciones de ambos clubes, viejos conocidos de la Euroliga, despedirse de la segunda competición europea en cuartos de final, sólo podía ser considerado como una decepción.

Unicaja tomó ventaja en el primer cuarto gracias a una notable presión defensiva que provocó numerosas pérdidas en el conjunto alemán. El juego ofensivo de los de Sasha Djordjevic tampoco funcionaba y sólo anotaba gracias a los tiros libres. Pese a que al final del primer cuarto se llegaba con ventaja para los malagueños (10-17), la sensación era que, si hubiesen entrado algunos tiros exteriores, Unicaja podría haber obtenido una ventaja mucho mayor.

Unicaja lograba la máxima ventaja al inicio del segundo cuarto tras un triple de Adam Waczynski (10-20), pero el conjunto bávaro reaccionaba y, con un parcial de 6-0 recortaba la diferencia de manera preocupante (16-20). Mediado el tercer cuarto, el Bayern había logrado arreglar los problemas de su titubeante ataque, y conseguía ponerse por delante (25-24) tras una serie de jugadas que destacaron por sus largas circulaciones de balón que desajustaban la defensa de los de Joan Plaza.

Pero las ganas y el esfuerzo que Alberto Díaz pone en cada jugada, provocaron varias pérdidas de balón en el equipo germano y nuevamente dieron la ventaja a un Unicaja liderado en ataque por los lanzamientos triples de Adam Waczynski; el talento y el desborde en la penetración de Nemanja Nedovic, y el dominio bajo los aros de Dejan Musli. Todo ello, junto con una nueva racha de incapacidad ofensiva del Bayern, permitía a los malagueños irse al descanso con siete puntos de diferencia (27-34).

Los jugadores alemanes salieron del vestuario con ganas de morder, y conseguían reducir la desventaja hasta los dos puntos (34-36). Kyle Fogg anotaba cinco puntos consecutivos para dar algo de aire a los jugadores verdes, pero el poderío físico de Devin Booker y la capacidad anotadora de un resolutivo Vladimir Lucic, permitía que el Bayern pasara a mandar en el partido (42-41). Pero, una vez más, los hombres de Plaza sacaban a relucir una de sus principales virtudes, el lanzamiento exterior, y con triples de Fogg y Waczynski, volvían a retomar el liderazgo del partido al final del tercer cuarto (44-52). Diez minutos separaban a Unicaja del éxito en la eliminatoria.

Los jugadores de Sasha Djordjevic no pensaban dar el partido por perdido, y se acercaron en el marcador, pero dos triples de Nemanja Nedovic otorgaban tranquilidad a los malagueños. El propio Nedovic se gustaba y un abuso de confianza le llevaba a tirarse otros dos triples sin demasiado criterio.

A cinco minutos del final, el Bayern se situaba a cinco puntos en el marcador (57-62). Unicaja seguía disfrutando de segundas opciones gracias a su dominio del rebote ofensivo. Cinco puntos consecutivos de Jamar Smith ponían diez de ventaja para los malagueños a sólo 3:40 para llegar al final del partido (57-67). La presión podía en los instantes finales al ataque de Unicaja y el Bayern se acercaba peligrosamente gracias a los tiros libres (66-69) a un minuto del final. Un tiro libre de Musli daba algo de aire a Unicaja (66-70) y los triples a la desesperada del Bayern no encontraban el aro. Un colosal tapón de Nemanja Nedovic sobre una bandeja de Anton Gavel sellaba prácticamente la victoria de Unicaja en el Audi Dome, en un partido muy trabajado cimentado en la defensa (69-74).

La próxima semana comienzan las semifinales de la Eurocup. Allí estará Unicaja, que se enfrentará al poderoso Lokomotiv Kuban, comenzando la serie en Krasnodar.