El Maccabi Haifa se hizo el pasado fin de semana con la liga israelí, al vencer en la final, que se jugaba este año a partido único, al eterno vencedor, el Maccabi Tel Aviv. Y si calificamos de eterno vencedor de la BSL Ligat ha'Al israelí al conjunto amarillo que juega en La Mano de Elías, no es por adornar el texto con un adjetivo rimbombante, sino por ceñirnos a los datos que ofrece el palmarés de la liga. Pese a que el Maccabi Tel Aviv ha tropezado en los últimos años con mayor frecuencia de lo acostumbrado, ya que perdió el título de liga en 2008 frente al Hapoel Holon, y el de 2010 ante el Hapoel Galil Elyon, la estadística es demoledora: desde la temporada 1953-54, de los 59 títulos disputados, el Maccabi de Tel Aviv se llevó nada menos que 50.

En cambio, para el Maccabi Haifa, este título conseguido supone el primero de su Historia, ya que lo más que había logrado, pese a ser uno de los clubes históricos de Israel que participa en la liga desde 1953, año de creación de la competición, era llegar a la final en el año 2009, donde cayeron ante el Maccabi de Tel Aviv. Además, había sido subcampeón de la Copa en cuatro ocasiones, pero este título constituye su mayor éxito.

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La final, disputada a partido único en el pabellón del Maccabi Haifa, el Romema Arena, presentaba un completo lleno para ver a su equipo, segundo clasificado de la temporada regular, con un balance de 17 victoria y 10 derrotas, frente a su todopoderoso rival del sur, el Maccabi de Tel Aviv, que había acabado primero con 22 victorias y 5 derrotas.

Fue un partido marcado por la igualdad, en el que los amarillos se fueron al descanso con ventaja en el electrónico (42-37). Pero, de la mano de sus líderes, el alero estadounidense elegido MVP de la liga, Donta Smith (12 puntos, 6 rebotes, 7 asistencias); el base Gal Mekel (21 puntos, 7 asistencias, 8 faltas recibidas), elegido mejor jugador israelí de la temporada; y el ala-pívot Pat Calathes (22 puntos, 10 rebotes y 6 faltas recibidas), el Maccabi Haifa le endosó a su rival un parcial de 29-21 en el último cuarto, que le sirvió para que el equipo entrenado por Brad Greenberg (elegido entrenador del año) se hiciera con el título y lo festejara en su propia pista con los aficionados locales.

Por parte del Maccabi de Tel Aviv, sólo Ricky Hickman (28 puntos, 5 asistencias), supo estar a la altura de las circunstancias. David Blatt apenas usó a David Logan (2 puntos en 10 minutos); Nik Caner- Medley (1 punto en 5 minutos), o Darko Planinic (1 minuto y 0 puntos).

La derrota supone un duro golpe a un equipo que está acostumbrado a ganarlo todo, y que este año ha tenido que conformarse con la Copa israelí.

Hace algún tiempo, nuestro compañero Fran Martínez nos hablaba de la idiosincrasia del Maccabi de Tel Aviv, un equipo que no está pasando su mejor racha, después del revés que supuso el fallecimiento de Moni Fanan, uno de los principales responsables de los logros conseguidos por el equipo macabeo, y de llevar dos años consecutivos siendo eliminado en cuartos de final de la Euroliga.