El Real Madrid no pudo seguir con su racha histórica de victorias en el Pionir de Belgrado ante un combativo Partizan de Belgrado, que quiere demostrar este año, con una plantilla más corta, que lo del año pasado no fue un espejismo. Los serbios consiguieron ganar un partido que dominaron entero a excepción del tercer cuarto, en el que apareció un Real Madrid más fuerte en defensa –siempre jugando mejor en individual que en zona- y corriendo de la mano de un agresivo Sergio Llull, que fue el mejor junto con Quinton Hosley.
Hosley, demostró que puede ser el tres que buscaba el Real Madrid. Muy agresivo en defensa y en el rebote en ambas zonas, con una excelente combinación de físico y atletismo, aunque todavía le viene un poco grande el salto de Turquía al gran nivel, en forma de conceptos como lectura de juego, sobre todo en cuestiones de tiros forzados y timing en dichos esfuerzos.
Por lo demás, se vio a un Real Madrid muy irregular, que no encontró unas piezas que le dieran continuidad a su juego, ni un sistema, ante un Partizan que jugó durante muchas partes del choque con una buena lectura de juego, jugando abiertos y dando velocidad al balón, y basándose en la clase y de Tepic y Rasic, la intendencia de Vitkovac, y la suprema inteligencia en el juego sin balón de Novica Velickovic.
El Asseco Prokom está mostrando, con un equipo menos mediático, que quiere borrar la imagen de la malísima temporada pasada, y por de pronto lo está consiguiendo, esta vez con mejor suerte que en la primera jornada con una victoria por 29 puntos ante uno de los peores equipos de la competición el Nancy.
Los polacos, tuvieron problemas en el comienzo del partido, ante el espejismo francés, pero tras el descanso, de la mano de un rejuvenecido Pat Burke – 16+4- y de un arrollador Daniel Ewing – que ya demostró buenas maneras en Uleb Cup- con canastas de todos los colores para un total de 32 puntos con 7 de 9 en tiros de 2 y 6 de 8 en triples, consiguieron llevarse por delante al conjunto francés.
El Armani Jeans sigue de capa caída. Los italianos no encuentran su juego, y sobre todo no encuentran un hombre en el que cimentar su juego, como antaño era el superclase Danilo Gallinari. A pesar de Hawkins, el Efes Pilsen consiguió sacar una valiosa segunda victoria de la mano de un juego muy equilibrado, con un Thornton que sigue en su segunda juventud y un Milos Vujanic que intenta reencontrarse consigo mismo.
Por otro lado el conjunto otomano confirmó esta mañana que Mario Kasun ha sido operado del hombre, y causará baja hasta final de la primera fase de la Euroliga.
En Atenas debutaba otro de los que oposita a peor equipo de la competición, el Panionios, que cayó ante el CSKA por 34 puntos, algo que quedó fielmente en demostrado en la defensa de uno y otro equipo, siendo capaz el equipo moscovita de capturar 21 rebotes más, y colocar 7 tapones. Lorbek volvió a tener un papel fundamental en el juego de su equipo, al igual que un Nikos Zizis, que este año tiene más minutos y aportación en el equipo de Messina.