Esta semana se han enfrentado el primer clasificado del grupo B contra el segundo. Madrid contra Efes, separados por tan solo una victoria de diferencia. Y sin embargo, en el Palacio de los Deportes no hubo partido. El equipo local pasó como un rodillo por encima de los turcos. 103-57 para los de blanco, una renta de 46 puntos.

Desde el minuto uno el Real Madrid empezó dominando, con un Mirotic enchufado haciendo valer su recién entregado trofeo de mejor jugador de la Euroliga en Octubre, con dos triples y una canasta, y Bourousis dominando en ambas zonas. El Anadolou Efes, por su parte, dependía de las penetraciones, con gran importancia de Planinic y de Jamon Gordon, mientras los interiores no estaban entonados. Sin embargo, no les servía para aguantar a un Madrid coral que comenzaba a abrir pequeñas diferencias en el marcador. Rudy sacaba muchas ventajas, y para más inri Bourousis clavaba los triples que tiraba (terminó con un 3/3). El primer cuarto finalizó con 19-13.

A partir del comienzo del segundo cuarto las diferencias aumentaban más y más entre ambos conjuntos, mientras el Madrid mejoraba la defensa y no dejaba jugar al equipo turco. El Efes, superado, tiraba de individualidades y sólo Scotty Hopson aportaba algo de luz al caótico juego de su equipo (en el tercer cuarto sufría una mala caída que lo mandó al banquillo). Savanovic estuvo en todo momento fuera del partido, 0/5 en tiros de 2 y un rebote. Según pasaban los minutos el Madrid ofrecía más espectáculo a un Palacio que ya se lo pasaba en grande. El entrenador turco, Oktay Mahmuti, probó varios quintentos, sin acertar con ninguno.

Draper fue el base del Madrid en el tercer cuarto. Bajo su batuta, el Madrid aumentó (aún más) su defensa y provocaba pérdidas en el rival que antes no tenían. La mayor seña de identidad de este Madrid, el contraataque, aparecía a raudales para delicia del público. Las diferencias en el marcador ya apabullaban, en el minuto 25 el equipo de Pablo Laso doblaba al Efes, 64-32. De nada sirvió que en este cuarto Barac mejorara su aportación, que había sido inexistente hasta entonces. Su equipo no encontraba tiros cómodos, y metía pocos de los que tenía. Sergio Rodríguez, por su parte, desplegó todo su juego, gustándose. Un par de alley-oops con Slaughter pusieron al estadio entero de pie. El tinerfeño llegó a las 11 asistencias.

El último cuarto era un trámite, con el partido decidido hacía bastante tiempo. Sin embargo, mientras el Efes estaba muy fuera, el Madrid tuvo pocos momentos que relajación, que el ex del Bilbao, Vasileiadis, aprovechaba para meter tres triples. El equipo turco en conjunto encestó 5, de 20 intentos. Solo Jaycee Carrol terminó con un 4/5. Dani Díez tuvo que esperar a los dos últimos minutos para entrar a jugar a un partido que en realidad no existió, salvo en los primeros 10 minutos. Prueba de ello es la valoración: 155 del Madrid por 31 del Anadolou Efes. El equipo blanco todavía no ha encontrado rival en Europa.

youtube://v/wxl4BKPuEes