El FC Barcelona Lassa viajaba a Atenas con los deberes casi hechos (faltaba certificar el primer puesto del grupo) tras batir sus récords de triples y asistencias en la competición y mostrándose superior al resto de rivales.
A pesar de la clara victoria en el partido del Palau Blaugrana (77-52), Xavi Pascual ya había comentado en la previa la importancia de este partido por la entidad del rival, el ambiente que genera la afición local, y la necesidad de una victoria para la clasificación del PAO para el Top-16.
Panathinaikos, por su lado, recuperaba todas las ausencias del partido de la primera vuelta, y debía demostrar que el paso de las semanas les habría dado esa mejoría que justificaba Djordjevic, tras el descalabro en el Palau Blaugrana. Cualquier cosa que no fuera una victoria del equipo del trébol podría provocar una auténtica tragedia griega.
El partido ha empezado con mucho desacierto en el aspecto anotador, pero con una sensación de serenidad en el equipo de Xavi Pascual, sabedor de su racha de 9 victorias consecutivas contra los griegos, y de la poca presión que recaía sobre sus espaldas.
Con el paso de los minutos y las rotaciones ha llegado el acierto en el tiro. Raduljica ha sido el hombre importante para los verdes, cargando con la segunda falta a Tomic y anotando casi el 50% de los puntos de su equipo en tan solo 5 minutos. Por el bando azulgrana, los pick&roll entre Satoransky y Tomic, y el acierto de Abrines han mantenido al FC Barcelona por encima en el marcador, a lo largo de los primeros 10 minutos (21-22).
El inicio del segundo cuarto ha mostrado tres aspectos relevantes durante los primeros minutos del encuentro: cambios constantes de Djordjevic buscando que la defensa azulgrana no lograra centrarse, duelos directos entre los interiores de ambos equipos (con mayor acierto para el PAO) y cierta permisividad arbitral favorable a los locales. Con ello, el equipo de Djordjevic ha logrado una ventaja de 5-7 puntos a la que quería aferrarse.
Se han visto los mejores minutos de los griegos, mostrado el carácter que se dejaron en el equipaje del partido de Barcelona y una defensa feroz que no ha dejado pisar la zona a los visitantes. El ataque azulgrana se ha atascado y Panathinaikos ha defendido lo que ha querido Diamantidis, siempre atento a las ayudas y con sus manos muy activas.
La falta de fluidez ofensiva del equipo de Xavi Pascual (muy enfadado además, por las facilidades defensivas) ha hecho que el parcial del segundo cuarto fuera un claro 24-13, para un resultado al descanso de 45 a 35. Raduljica seguía en forma (15 puntos sin fallo) y Diamantidis se ha hecho con el control del ritmo del partido. Uno de los jugadores más importantes de Europa de los últimos 10 años demostraba que todavía le quedan algunas lecciones que dar.
El tercer cuarto ha empezado con un grave proceso de somnolencia azulgrana, que ha seguido sin poner la intensidad defensiva, para igualar la mostrada por PAO. Pocas piernas y demasiadas manos, que no han logrado acabar con las canastas fáciles de los locales. Raduljica ha seguido dominando a todos los interiores azulgranas (principalmente a Tomic), ante la resistencia solitaria de Álex Abrines.
El mallorquín ha demostrado que la madurez y mejora física de las últimas semana tiene continuidad. Ha finalizado este tercer cuarto con un triple sobre la bocina que le otorgaba 21 puntos, y acercaba al FC Barcelona Lassa a 9 puntos de los griegos (66-57).
Quedaban 10 minutos para intentar vencer y complicarle la clasificación para el Top-16 al PAO. Hasta el momento, Djordjevic había dado con la tecla para desactivar a todo el juego interior azulgrana. Es cierto que será difícil que se pueda volver a dar, pero Tomic se ha cargado de faltas demasiado rápido, Samuels i Doellman han estado desaparecidos y Lawal volvía de una lesión. Además, Vezenkov tampoco ha sido capaz de aportar lo que sus compañeros suelen hacer en cada encuentro.
La pelea táctica entre ambos entrenadores ha tenido un último asalto con sorpresa. Xavi Pascual ha realizado un cambio que le ha acercado a la victoria. El despertador del juego azulgrana era de marca griega, y de nombre Perperoglou. Pascual le ha colocado en el puesto de cuatro abierto (muy abierto), lo que ha permitido aprovechar su buen lanzamiento de 3, que sumado al acierto de Oleson y Abrines, ha desactivado la enorme diferencia del PAO (+16) para acercarse a 3 puntos, a falta de 5 minutos para el final.
Pero una remontada no es tal si no logras ponerte por delante. Ha aparecido el que se las sabe todas, el que habla griego y todos los idiomas que él quiere, ha vuelto a escena Diamantidis, que con sus lejanos triples le ha dado un respiro a su equipo (+8 a falta de 3 minutos).
Con los cambios, han vuelto a pista los jugadores que no habían sido capaces de defender y anotar con consistencia hasta el momento (Navarro, Tomic, Doellman y Arroyo). ¿Serían capaces de lograr rematar el trabajo de sus compañeros?
Los últimos 3 minutos han demostrado que se merecía ganar el que más constante ha estado durante los 40 minutos, el que más lo necesitaba y el que mayor intensidad ha puesto a su juego. En el partido de hoy, este equipo no ha sido el de Xavi Pascual, que ha padecido el mal partido de sus interiores y la soledad en la anotación de Abrines (21p.) y Perperoglou (13p).
PAO ha logrado la clasificación para el Top-16 gracias a una gran actuación de Raduljica y Diamantidis. El serbio, que ha dominado la zona a placer, ha anotado 25 puntos (su récord personal en la Euroliga), mientras que 3D se ha resarcido de su mal partido en el Palau Blaugrana con 20 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias, para 29 de valoración.