Tras tres derrotas consecutivas y dos de ellas en casa, tuvo que llegar el Real Madrid a Kaunas para devolver al Zalgiris a la senda de la victoria (81-72) delante de sus aficionados. Los locales terminaron de forma muy sólida el encuentro y fueron guiados durante el encuentro por Keenan Evans, que anotó 20 puntos y capturó 5 rebotes.

El partido estuvo igualado hasta el último cusrto. El luminoso marcaba empate a 66 a falta de cinco minutos para el final. A partir de ahí, el encuentro se rompió gracias a un parcial de 8-0 favorable al Zalgiris, que ponía el 74-66. Una de las jugadas determinantes del partido fue la falta ofensiva pitada a Edy Tavares sobre Rolands Smits. Dicha falta acabó siendo una antideportiva, decidida por los árbitros. Con esto, los lituanos tomaron la oportunidad dada y sumaron 4 tantos que les pondrían 8 arriba con un minuto y cuarenta segundos para la bocina final.

El Real Madrid se secó en ataque en esos instantes -cuatro minutos- hasta que llegara el triple de Dzanan Musa para poner el 76-69. El alero fue el máximo anotador blanco, con 22 puntos, seguido de Mario Hezonja, que aportó 17. La pareja más destacada de los vencedores fueron Edgaras Ulanovas y Tyler Cavanaugh, que anotaron 19 y 15 puntos cada uno.

El cuadro lituano salió vencedor a pesar de tener un pobre porcentaje en tiros de dos (33.3%). Los rebotes ofensivos y las puntos tras recuperación fueron clave. 16 y 17 puntos respectivamente llegaron de este modo.