Después de la derrota en liga en el último clásico, el Real Madrid se presentaba en la Ciudad Condal con muchas ganas de revancha, y lo llevaría a cabo a la perfección. El Barça volvió a jugar sin Navarro, Ribas, Doellman, Claver y Lawal , los cinco jugadores siguen lesionados.
1º Llull se reivindica
El Madrid empezaba dominando, con un 0-7 en los primeros 3 min. Los locales tardarían en reaccionar pero en los dos siguientes minutos anotarían 9 puntos para acercarse 9-15. Rice sería el encargado de liderar a los catalanes en el primer cuarto, pero no sería suficiente para aguantar la acometida madrileña. Sergio Llull sumaría 9 puntos y 4 asistencias en unos magníficos diez minutos en los que nadie pudo detenerle. En contraste con el último clásico, el Madrid empezó pletórico desde la línea de 3, con 4/5 en triples. El primer cuarto acabaría con 17-29 con el equipo local abajo por 12 puntos y sin ser capaz de frenar el juego de los de Laso.
2º Exhibición de Randolph
El segundo cuarto empezaría con un tapón brutal de Randolph a Dorsey, jugada la cual acabaría con un triple del Chapu Nocioni, con lo que se subiría ya a 15 puntos de diferencia (17-32). Koponen respondería a otra canasta del argentino con un tiro en suspensión de pura clase, una de las pocas jugadas de calidad de los azulgrana en el cuarto. Pero Anthony Randolph no estaba para bromas y volvería a ponerle un colosal tapón a Dorsey, el pívot del Barça tendría pesadillas con su rival esta noche. El ala-pívot del Madrid seguía en racha y metería un triple en la cara de su defensor para mantener a su equipo liderando el marcador (25-39). Los visitantes seguían atacando y Llull sumaría una bandeja con Holmes en frente que pondría al Madrid 19 puntos arriba (25-44). El Barça se encontraba sin recursos en ataque, asfixiado y sin oportunidades para anotar. Sergio Llull volvería a sumar una increíble canasta, con un triple sobre la bocina (fin de posesión) que pondría al Madrid con 22 puntos de ventaja (28-50). Seguidamente, Randolph lo volvería a hacer y con un tapón sobre Tomic sumaría ya tres en un cuarto. Bartzokas enloqueció con esta acción y fue penado con una técnica. El cuarto acabaría con un tiro de dos de Oleson, que no serviría para paliar la humillación que el conjunto local recibió en el primer período. El encuentro se iría al descanso 31-54, con un Madrid pletórico y un Barça apagado, tan solo Rice (11 puntos) rendiría en los blaugrana, mientras que en los blancos, Llull sería el que más brillase (17 puntos).
3º Los aficionados empiezan a abandonar el estadio
El partido mantendría la dinámica anterior durante los primeros minutos, con el Barça con problemas para notar y el Madrid a un nivel más de intensidad y acierto. Rice sumaba 4 puntos seguidos para acercar a su equipo en el marcador (36-59). El Palau Blaugrana no paraba de animar con fervor, pero no estaba sirviendo de mucho, a falta de cinco minutos Doncic culminaría un contragolpe que pondría al Madrid 31 puntos por encima (36-67). El Barça realizaría un parcial de 5-0 comandado por Rice para recortar distancias (42-68) pero resultaría tan solo un espejismo. El cuarto siguió la misma línea de la primera parte, con un Barça en el que Holmes sería el único jugador que realmente estaba dejándose la piel. El tercer período acabaría con los catalanes 29 puntos por debajo (46-75) y con parte de la afición blaugrana marchándose del estadio ante tal esperpento de partido.
4º Se consuma la hecatombe azulgrana
El último cuarto sería de transición, con el partido ya decidido y el conjunto local sin capacidad ni ganas para remontar. Rudy Fernández anotaría un triple para aumentar la ventaja a un demoledor (46-81) a falta de 7 minutos. En este punto del encuentro el conjunto blanco ya sumaría 14 rebotes en ataque: daba la sensación de que el Barça había ido ahí por hacer algo, puesto que en ningún momento luchó realmente por el partido, más allá del acierto en ataque, los blaugrana perdían todos los balones divididos y su intensidad en el rebote y en defensa era ausente. Randolph , con 9 puntos seguidos pondría el +41 en el marcador (46-87). Faltando tres minutos para el final, el Barça sumaría sus primeros puntos en el último cuarto (48-91), lo que quedaba por jugar era un trámite, pero aun así, Bartzokas no sacaría a Rice de la pista, lo que llama la atención pues el base lleva una gran cantidad de minutos en las espaldas esta temporada.
El resultado: 63-102 y los blaugrana humillados en su propia casa, sufriendo la derrota más abultada (a domicilio) de la historia de los clásicos.