Sexta derrota en los últimos siete partidos en Euroleague para el Real Madrid. Los de Pablo Laso fueron a remolque durante todo el encuentro, a merced de un mal incio de partido (18-8). 

En el segundo periodo, Doncic despertó a los suyos y Carroll, muy activo en ambos lados de la cancha (acabó con 4 robos), se enchufaba en el que sería su mejor partido en esta temporada, que hacía que los blancos se mantuviesen en el encuentro al descanso (34-30). 

El tercer cuarto fue, de nuevo, para los griegos, gracias a un parcial de 9-0 que puso el 52-40 tras un 2+1 de Jamel McLean. El Madrid, completamente contra las cuerdas en el peor escenario posible (56-47). 

De nuevo, el Real Madrid se vino arriba de la mano de sus dos referentes. Laso proponía una "zona press" con 2-2-1 que surtía efecto, aunque el partido seguía jugándose a ritmo rojiblanco. Una técnica señalada a Rudy Fernández metió a los suyos en el partido, que remontaron desde el lanzamiento exterior, culminado por el cuarto lanzamiento de Carroll, que empataba el partido a 72 con 12 segundos por jugarse. Printezis tuvo dos tiros libres a falta de 4 segundos, pero erró los dos y el partido se iba al tiempo extra. 

El griego compensó los fallos finales con un clínic de baloncesto en el último periodo, en el que se fue a los 9 puntos y dejando una maravillosa asistencia completamente de espaldas. El afán de Doncic, que acabó con su mejor marca anotadora (33 puntos) era insuficiente ante un Real Madrid demasiado desequilibrado en el balance interior/exterior. Una nueva técnica, esta vez al banquillo madridista, y un tiro de Bryan Roberts terminaron de sentenciar el encuentro (92-83)

1. Vuelve la "Zona Press" de Laso, con éxito. Quizás la mejor noticia de este partido para los blancos es la vuelta, con bastante éxito, de la mítica estrategia defensiva que tantas remontadas dio al equipo en el pasado. Con una variante: el pivot no es el que presiona, sino el que defiende la zona. Lo normal en estos casos. Con Doncic y Rudy como primeras puntas, más Carroll y Thompkins pendientes de los pases bombeados, el Madrid consiguió la difícil tarea de remontar en el Pireo. 

2. Demasiados frentes abiertos en el Olympiacos… Los locales cubrieron de forma coral el mal partido de Spanoulis (7 puntos – todos ellos en la primera mitad – y 4 asistencias). Primero fueron Nikola Milotinov (21 de valoración) y Papanikolaou (22 gracias a sus 14 puntos y 8 rebotes) quienes acompañaron a la leyenda de Olympiacos para dar la vuentaja a los suyos en la primera mitad. En la segunda, despertó el poderío en la pintura de McLean, cuyos 2+1 sentaban como un jarro de agua fría en plena remontada blanca. El americano acabó con 12 puntos, 5 rebotes y 21 de valoración. El héroe final fue Printezis, que acabó siendo el mejor de los suyos con 21 puntos y 7 rebotes para 27 de valoración. Todo ello, bajo la magistral dirección del letón Strelnieks, impecable desde los tiros libres y fulminante con un triple en el último cuarto. 

3. …frente a la excesiva dependencia de Jaycee Carroll y Luka Doncic. Ambos jugadores se combinaron para anotar 57 puntos. Casi el 70% del total de su equipo. Un partido de "reconciliación" para el de Wyoming (promediaba hasta hoy 5,7 puntos en competición europea), que no dudó en tomar las riendas en el momento más calientes, anotando auténticas virgerías (algunas de ellas merecían ser premiadas, además, con adicional) y anotando el triple que empató el encuentro. Desapareció en la prórroga y perdió un balón clave. El esloveno, por su parte, firmó su (enésimo) mejor partido de la temporada, batiendo su récord personal de puntos y añadiendo 6 rebotes y 4 asistencias en el partido que más minutos ha jugado en toda su carrera. 59 de valoración entre ambos, por 13 del resto del equipo. Una estadística demoledora.