No pudo ser. Unicaja naufragó en Belgrado en un partido en el que fueron a remolque durante la mayor parte del tiempo. Los de Plaza sufrieron la dura defensa del Crvena Zvezda, que aprovechó su espectacular acierto desde el perímetro para lograr una victoria de mérito, con una ventaja, además, que puede ser importante al final del Top 16 para dilucidar quiénes serán los cuatro clasificados al Top 16. Jovic fue el nombre propio del equipo serbio, con 15 puntos y 24 de valoración, bien secundado por Guduric, con 13 puntos, y Simonovic, clave en el último cuarto desde el perímetro. Por parte de Unicaja, sólo Jamar Smith hizo acto de presencia, con 11 puntos, en un partido que acabó con un marcador de 87 a 73.

Ambos equipos comenzarían poco acertados de cara al aro. Unicaja parecía querer continuar con su particular dominio del rebote ofensivo, pero no lograban anotar sus primeros tiros. Jovic abriría el marcador con dos tiros libres, y Unicaja respondería pronto con una buena circulación de balón que acababa con mate de Thomas. Los de Plaza gestionarían los primeros minutos de partido gracias a su superioridad en el rebote, debido a los errores en ataque. Kuzminskas aprovecharía una de esas situaciones con varios rebotes en ataque para dar la primera ventaja al equipo malagueño, pero pronto empatarían los serbios con un dos más uno de Zirbes.

Los problemas en el rebote del Crvena Zvezda no cambiarían el planteamiento de Radonjic, que buscaba una defensa muy agresiva para castigar a Unicaja, con bastante éxito en los primeros minutos de partido. Unicaja carecía de fluidez en ataque, pero se mantenía con ventaja en el marcador, gracias a una clara mejora en el tiro libre. Sin embargo, el equipo serbio logró retomar el mando del marcador, con un triple de Guduric, y una grandísima defensa, que noqueaba al conjunto de Plaza, obligado a pedir tiempo muerto a falta de un minuto, con 16 a 12 para el Crvena Zvezda en el marcador. Plaza volcaría parte de ese tiempo muerto en hacer despertar  Vázquez, con una bronca de órdago que se tradujo en una canasta del gallego en la siguiente posesión.

El Crvena Zvezda lograría marcharse al final del primer cuarto con una cómoda ventaja, gracias a dos decisiones arbitrales cuestionadas: la primera, una falta sobre Kuzminskas no señalada, y la segunda, tres tiros regalados a Guduric, que gesticuló al errar el triple lo suficiente para engañar al trío arbitral. De esos tres tiros libres salió el resultado al final del primer cuarto, 21 a 14 para los locales.

No cambiaría la mala racha de Unicaja al inicio del segundo cuarto, con un campo atrás. Junto a ello, Guduric sacaría un dos más uno para colocar a los suyos con diez de ventaja. Unicaja sufría para anotar, y sólo un triple estratosférico de Jackson mantenía al equipo malagueño vivo, pero necesitaban más para recortar la diferencia. Jovic, con cinco puntos seguidos, colocaba la máxima ventaja, y Plaza solicitaba tiempo muerto para frenar la sangría local.

La defensa de Unicaja hacía aguas y las pérdidas se sucedían. A ello se le sumaban unos porcentajes de tiro muy pobres, haciendo imposible la remontada. Aún así, el Crvena Zvezda no terminaba de romper el encuentro, perdonando a un débil Unicaja. En esta tesitura, Plaza optaba por dar entrada a tres pequeños, Díaz, Nedovic y Smith, con Cooley en la zona, que sufriría con Maik Zirbes. El alemán era decisivo en la zona y con su actuación, los serbios seguían liderando el marcador con comodidad. El Crvena Zvezda se marchaba al descanso con 41-31, acabando el cuarto con un espectacular tapón de Jack Cooley.

Hendrix sería el primero en anotar tras el descanso, con una suspensión desde el tiro libre. Unicaja mostraba su mejor cara en los primeros minutos, con una buena defensa, pero Zirbes era demasiado en la zona. Smith colocaría a cinco a Unicaja, con un triple lejanísimo, pero pronto los serbios se reharían para volver a abrir brecha. Unicaja vivía de su inspiración, lo que no era suficiente, pues el Crvena Zvezda anotaba gracias a un ataque más elaborado.

Mediado el segundo cuarto, de nuevo Smith recortaba desde el perímetro, y la defensa malagueña permitía soñar con la remontada. Sin embargo, la actuación arbitral dificultaba la misma, permitiendo excesivos contactos de Guduric sobre Kuzmisnkas, que se desesperaba. El propio Marko Guduric mantenía la ventaja serbia, con mucha agresividad de cara al aro, siendo el hombre clave de su equipo. Cooley tiraba de entrega para sostener a Unicaja, mas no era suficiente y el Crvena Zvezda se volvía a marchar con diez de ventaja, gracias a un triple de Simonovic (60-50, a falta de 1:30). Jamar Smith salvaría el cuarto, con otro triple, cerrando el cuarto en 60 a 53.

Empezaría fuerte Nedovic, sacando un dos más uno, aunque erraría el tiro libre. El Crvena Zvezda no lograba anotar con la misma facilidad, y Unicaja seguía recortando, hasta que apareció Simonovic, con un triple desde su casa, para colocar al Crvena Zvezda con ocho de ventaja. Unicaja parecía entregar la cuchara, con varios errores ofensivos y con evidente miedo a lanzar.

Si Unicaja ya sufría para anotar y para remontar, la puntilla la puso una técnica señalada a Plaza, sin explicación aparente. El técnico catalán pedía que se le explicaran los motivos, pero el trío arbitral hizo caso omiso. El Crvena Zvezda aprovechaba para colocarse con 68 a 57 y Plaza pedía tiempo muerto. Entonces aparecía el héroe local, Simonovic, con dos triples que hacían explotar la Sala Pionir, dándole medio partido a los suyos.

A falta de tres minutos, la diferencia se situaba en los diez puntos, y los errores malagueños terminaron sentenciando el encuentro. El Crvena Cvezda había aprovechado sus bazas a la perfección, defendiendo su feudo y presionando de forma excelente al conjunto de Plaza, que no podía anotar con facilidad. Al final, Plaza buscó reducir la diferencia en el marcador para poder remontar el basket average en casa, pero el tremendo acierto del equipo de Radonjic aumentó la diferencia, terminando el partido en 87 a 73, con Jovic como hombre más destacado, con 15 puntos y 24 de valoración, y con Guduric y Simonovic como hombres clave, muy acertados en la parcela ofensiva.