El pasado sábado se disputaba en la BBL -Baltic Basketball League- el clásico entre Zalgiris Kaunas y Lietuvos Rytas. Estos dos equipos tienen una rivalidad histórica muy marcada que hace que estos encuentros sean el centro de atención del baloncesto lituano.
Esta vez se añadió un tercer factor: el arbitraje. El partido estaba siendo dominado por los visitantes del Lietuvos, con una gran actuación del ex jugador del Lagun Aro, Ivan Koljevic. El Zalgiris consiguió remontar de la mano de Marko Popovic. Sin embargo, Lietuvos volvió a ampliar las distancias cerca del final y fue cuando la grada local estalló.
Convencidos de que el arbitraje estaba siendo excesivamente injusto con los suyos, el público comenzó a arrojar objetos de manera descontrolada sobre el parquet. La mayoría de ellos eran latas de cerveza. Así que los jugadores de ambos equipos decidieron refugiarse en los vestuarios a la espera de que se calmase la situación.
Al final, los jugadores del Lietuvos decidieron no volver a la pista por considerar que corrían serios riesgos y los árbitros decidieron dar por finalizado el encuentro.
Resolución de la BBL: Zalgiris sancionado
El comunicado de la BBL dice que “con 1.52 minutos por jugarse del tiempo reglamentario del Zalgiris-Lietuvos Rytas, los espectadores comenzaron a lanzar diferentes objetos a la pista y esto continuó durante varios minutos con intensidad progresiva, lo que tuvo como resultado una situación incontrolable. El comportamiento de dichos espectadores podría haber resultado en lesiones serias e incluso la muerte de los participantes. Consecuentemente el partido fue interrumpido y el BC Zalgiris sancionado con la derrota.”
El resultado del partido es 0-20 para el Lietuvos y al Zalgiris le corresponden 0 puntos. Además, al Zalgiris le han impuesto una multa de 10.000 y deberá jugar su próximo partido como local -el martes- con las gradas vacías, a puerta cerrada.