Llegan las semifinales del Eurobasket, y con ellas, y como es lógico, se acentúan las virtudes de los rivales; España deberá hacer frente a uno de los equipos más atractivos e inteligentes de la competición. La Eslovenia de Igor Kokoskov está preparada para poner en apuros a los pupilos de Sergio Scariolo, que tendrán que rendir a su máximo nivel para acceder a la gran final del torneo continental.
Enfrente, un equipo dirigido con maestría por el coach Kokoskov, que ha dado rienda suelta al talento de sus jugadores y que lleva a cabo un baloncesto rápido, contundente y letal. Eslovenia es un dragón, un dragón de dos cabezas.
Goran dragic, el filo vertical

El comandante natural de los Dragones, Dragic es sin duda el jugador más determinante de la selección eslovena. Su juego no ha dejado de crecer, y tras una gran campaña en Miami ha llegado en plenitud al Eurobasket. Cierto es que los minutos que acumulan sus piernas pueden pesarle en el partido frente a España, pero ante Letonia ya demostró que en los minutos finales es capaz de sobreponerse al cansancio para sentenciar.
Vertícal, rápido y peligrosísimo en espacios abiertos, Dragic es un filo vertical capaz de romper cualquier defensa que trate de atarle en corto. Está imbuido en el aura de los zurdos, y ha mejorado mucho sus prestaciones desde más allá del arco. Kokoskov, consciente de las necesidades de Goran para brillar le ha envuelto en un juego abierto, con un único interior (Vidmar) capaz de generar espacios con los bloqueos. Y Dragic ha respondido, no solo anotando a placer, sino incluso mejorando sus prestaciones como pasador. En el torneo está promediando 21.9 puntos, 3.9 rebotes y 5.4 asistencias.
luka doncic, la efervescencia y la genialidad

Llegaba con las expectativas por las nubes, Europa entera atenta a la explosión del que puede ser el mayor talento del Viejo Continente en un futuro cada vez más cercano, y ha reventado todo eso por las nubes. Cuesta creer que Doncic tenga únicamente 18 años, cuesta creer que en su bisoñez sea capaz de dominar los partidos con tan insultante facilidad, pero así es Luka Doncic.
El joven de Ljubljana se ha encontrado en el combinado nacional un escenario perfecto en el que desatar su ingenio, y se ha convertido de golpe y porrazo en el líder emocional de la selección. Igor Kokoskov detectó las posibilidades de darle alas a Doncic, y no dudó en darle toda su confianza. Doncic, al ver que Kokoskov le daba la mano, no tardó en agarrarle del brazo; hasta ahora no habíamos visto la versión más pura de Luka Doncic, pero con Eslovenia ha dado rienda suelta a sus recursos, su toma de decisiones es impropia de la edad de su carné, pero ahí está, dominando Europa con 18 años. Su campeonato es absolutamente increíble: 15.7 puntos, 7.7 rebotes y 3.1 asistencias de promedio, y la sensación de que aún no ha hecho más que asomarse a su mejor nivel.