Durante el último partido de la preparación, España caía estrepitosamente en Lituania creando un clima de nerviosismo y desconfianza en un equipo que lo había ganado todo hasta entonces. Con la victoria de hoy se cierra el círculo creado y se volvió a ver la mejor versión del combinado español. Los cuartos de final están más cerca.
España salió al partido con Garbajosa de ala pívot y acompañado de Ricky Rubio, Navarro, Rudy Fernández y Pau Gasol. El primer cuarto ha sido una prolongación de las malas sensaciones que está transmitiendo España en este campeonato. A pesar de comenzar bien con un 6-2 y claras canastas de Rudy, Navarro y Garbajosa, Lituania poco a poco se iba encontrando muy cómoda en el parquet haciendo mucho daño en ataque a base de continuos pick and rolls que acababan en balones interiores a Ksistof Lavrinovic y Petravicius o con triples del nuevo jugador del Real Madrid. Por si no fuera poco, el entrenador de Lituania sabía leer el partido y condenaba a Rudy Fernández a tener que defender a Maciulis en el poste bajo donde sufría ante un jugador con más cuerpo. Tras un intercambio de canastas por parte de ambos equipos, España dejó de estar acertada y las diferencias aumentaban. Balones perdidos, tiros precipitados y Pau Gasol aislado del ataque, sin recibir balones claros en el poste bajo. Lituania se animaba y se iba del marcador. Scariolo seguía sin saber a quién dar el mando de la Selección ya que ni Ricky ni Raül estaban entonados en los primeros minutos. Un 10-19 preocupante dejaba claro que España tenía que mejorar mucho su juego para no irse a casa antes de tiempo. Marc Gasol y Javtokas se peleaban una y otra vez en la zona y el lituano se llevaba el combate. Dos faltas personales del de Sant Boi en ataque le llevaban al banco mientras que Javtokas acumulaba puntos y faltas recibidas. Felipe Reyes salió también muy espeso como cuarto pívot y dos pérdidas consecutivas lastraban aún más los ánimos españoles que se iban por detrás en el marcador al finalizar los primeros 10 minutos, 15-24.

Sin embargo, cuando todos los que presenciábamos el partido creíamos que el encuentro no tenía ya solución, apareció el milagro de los héroes de Japón. Un triple de Rudy y dos mates en transiciones de Pau Gasol igualaba el electrónico y daba una energía extra a los jugadores que por primera vez en el Europeo disfrutaban jugando a baloncesto. El festival lo continuaron Felipe Reyes, Navarro y Garbajosa para cerrar un parcial de 23-0 que dejaba a los lituanos fuera del Eurobasket. La primera canasta lituana en el cuarto llegaba pasados los 7 minutos de juego y las sensaciones no podían ser mejores. Había vuelto la ÑBA. Gracias a la intensidad en defensa y a un juego vistoso y un tanto anárquico en ataque, la selección se transformaba y pasó de estar sumida en una crisis interna a volver a aspirar a todo. Lituania se veía superada en todas las facetas del juego y sólo una zona conservadora impedía que se fueran al descanso con una desventaja superior, 40-32.
Los hombres de Sergio Scariolo volvieron a salir algo nerviosos tras la reanudación. Los buenos puntos que Pau Gasol había conseguido en el segundo cuarto en transiciones y tras rebotes ofensivos no llegaban al inicio del periodo gracias a los dos contra unos que los lituanos realizaban en el poste bajo. Una España intermitente no acababa de despejar las dudas de anteriores encuentros aunque delante tenían un rival grogui que tampoco plantaba cara y que no creyó en la victoria durante la segunda mitad. La doble R funcionó como lo hacía en la Penya por primera vez en el Eurobasket y se cerraba el partido antes de lo previsto. Ricky asistía con facilidad mientras que Rudy luchaba por cada posesión. Sólo Javtokas y Petravicius hacían algo de daño en la zona. Sin Jasaitis lesionado, y con Kleiza y Lavrinovic desaparecidos del encuentro, los pívots eran la única referencia en ataque. Las diferencias se fueron ampliando hasta superar los 20 puntos y Scariolo comenzó a rotar a los jugadores dando minutos incluso a Víctor Claver. Sólo un par de triangulaciones entre Navarro, Marc Gasol y Felipe Reyes volvían a levantar a los aficionados de los asientos. Lituania se conformaba con no salir humillada y acabó los últimos 10 minutos en zona hasta llegar al 84-70 final. El miércoles, jugarán el último partido de la segunda fase para contra Polonia. Será a las 18.15 y de nuevo, será una autentica final.
