Mañana el TAU Baskonia tendrá su primera prueba de fuego en Atenas ante el Panathinaikos de Zeljko Obradovic. El partido se disputará en el OAKA ante más de 18.000 enfervorecidos hinchas verdes que intetarán llevar en volandas al PAO, uno de los mejores equipos de Europa.
Ayer Velimir Perasovic habló del ambiente que le espera en la capital griega, afirmando que tendrán opciones de ganar, puesto que en “condiciones normales” el Baskonia es capaz de vencer a cualquier equipo de Europa. Al respecto de estas “condiciones normales“, afirmó que tiene que esperar que así sea, a pesar del ambiente hostil que beneficiará al Panathinaikos.
Pablo Prigioni, sin embargo, cree que el equipo se sentirá a gusto haciendo frente a la presión: “Vamos a Atenas con buenas sensaciones. Va a ser bonito jugar en un pabellón con tanto ambiente, por mucho que parezca que eso nos puede perjudicar“.
Por otra parte, el próximo jueves el Maccabi de Tel-Aviv tendrá que enfrentarse al Olympiakos en el Pabellón de la Paz y la Amistad. El técnico hebreo se mostró más contundente que los baskonistas al respecto: “El arbitraje es muy importante, si les pitan el 25% de las faltas que hacen estará bien. Ellos hacen entre 90 y 100 faltas en cada partido y les pitan 25“, dijo del equipo de Kazlauskas.
Además aprovechó la ocasión para lanzar una puya a sus aficionados, que este año no parecen animar tanto en casa como el año pasado: “Los aficionados son la razón por la que jugar en casa es una ventaja. Deberíais saber que en Grecia los hinchas del Olympiacos no nos van a dejar hablar ni ver. Nosotros tenemos que hacer lo mismo aquí“.