El Joventut no pudo aprovechar una oportunidad de oro para conseguir ventaja respecto al Olympiacos en el grupo. La infernal Sala Pionir fue inexpugnable para los de Aíto ya que el Partizan llevó la iniciativa durante prácticamente todo el encuentro entre los petardos provenientes de la grada. Según Aíto “el equipo está teniendo altibajos, con algunos partidos buenos y algunos partidos malos“. El desgaste físico está haciendo mella en el DKV. Los protagonistas del equipo serbio, Cummings y Drobnjak contaron esta vez con la colaboración de Tripkovic y Perovic para desquiciar al equipo badalonés, que acabó el partido cometiendo faltas técnicas que incrementaron la diferencia final (85-70).
Derrick Sharp volvió a ser clave en los últimos minutos del partido del Maccabi para hacer posible la victoria amarilla, anotando sus 11 puntos a partir del minuto 35. Los israelíes sufrieron para derrotar al Pau Orthez en el Nokia Arena. El ex-jugador del Etosa Alicante, Britton Johnsen brilló con 20 puntos en el lado de los franceses, pero entre Vujcic (12 puntos y 11 rebotes) y Sharp (anotó los 8 últimos puntos locales en los últimos 9 segundos, 6 de ellos tiros libres) amarraron la victoria. Spahija no está contento con este Maccabi, pero aunque no es el del año pasado, lleva el camino a cuartos bien encarrilado.
El Winterthur Barcelona sigue lanzado y derrotó al Efes Pilsen en casa. Los de Mahmuti tuvieron peores porcentajes en el tiro y no pudieron sobreponerse al tirón de los de Ivanovic en el final del segundo cuarto, en el que un parcial liderado por Kakiouzis, Lakovic y Fran Vázquez -que se lesionó al final del partido- hizo despegarse a los blaugranas. Después los tucos lo intentaron y a punto estuvieron de darle la vuelta al marcador, pero en la última parte del partido Navarro (24 puntos) volvió a dejar sin opciones a la escuadra otomana. “El equipo ha demostrado que no le tiene miedo a nadie“, declaró Juan Carlos Navarro.