Las últimas declaraciones de Pini Gershon han abierto una brecha en el entramado del Maccabi de Tel Aviv y un período de especulación y rumores acerca de quien ocupará el puesto de entrenador el año que viene.
El mal juego del equipo durante casi toda la temporada, y sobre todo los malos resultados han sido un caldo de cultivo para que el mal ambiente se haya asentado en todos los estamentos del equipo.
Ranaan Katz, copropietario del Maccabi (posee el 33% de las acciones amarillas) criticó la marcha del equipo tras la derrota en Madrid, a lo que Gershon contestó con un provocador “La mayoría de dirigentes del Maccabi son buenas personas, muchos de ellos son inteligentes“.
Katz se dio por aludido y replicó al entrenador: “¿Pini quiere decir que soy estúpido Debería dejar de hablar y ponerse a trabajar“. La bola de nieve se ha ido haciendo más grande y ambos puntales macabeos se han echado en cara cosas como el no-fichaje de Charles Smith (ex-Scavolini y mejor anotador de la Euroliga el año pasado). Para Katz, Gershon desestimó su fichaje cuando estaba apalabrado, y para el entrenador, los dirigentes no le han ofrecido el dinero necesario para hacer un equipo capaz de ganar la Euroliga por tercera vez consecutiva.
Al final, el presidente Mizrahi pudo atajar la polémica con una orden clara dirigida a Gershon, “No hablar más de Katz en los medios“. Pero por todos es sabido que Pinhas Gershon tiene un instinto especial para generar polémica, y tras la remontada y victoria ante el Ulker en Casa (gracias a un Jamie Arnold que apenas un mes antes estaba defenestrado por el entrenador), Gershon no mostró su alegría y sorprendió a todos con una brusca declaración: “En dos meses no estaré aquí“.