10, 9, 8, 7… Esos eran los segundos que iban restando para el final en el Target Center de Minneapolis. Y no, no eran los Timberwolves los que jugaban. Uno miraba el marcador y viendo ese empate a 46-46 podía pensar en que la cuenta atrás era para llegar al descanso, o como mucho el final del tercer cuarto.  Lo que menos podía imaginarse era que el final que se acercaba era el del encuentro, y no sólo de los 36 minutos oficiales que dura un partido completo de high school en USA, sino el final de la cuarta prórroga. Increible pero cierto.

Amir Coffey, un alero zurdo de 1,96m de segundo año en Hopkins High School conseguía lo imposible después de un penoso 2/10 hasta el momento y hacía realidad lo impensable anotando de manera inverosimil este triple que daba la victoria a los Royals ante Shakopee en la semifinal del Class 4A Minnesota State Championship

youtube://v/Tgcen2T-oQM

Coffey, hijo del ex-jugador de los Golden Gophers de Minnesota y que también tuviese un breve paso por los Timberwolves en la NBA Richard Coffey, no se lo podía creer, pero la incertidumbre llegó cuando en plena celebración los colegiados anularon la validez del triple por considerar que estaba fuera de tiempo, aunque una vez más, el Instant Replay aclaró las dudas y los árbitros dieron por buena la canasta que claramente estaba dentro de tiempo.

Los Hopkins Royals son el máximo favorito a ganar el título estatal gracias a un excelente record de (30-1) y mantener la hegemonía de las últimas temporadas en dicho campeonato ya que jugarán su cuarta final en los últimos seis años. Campeones en 2002, 2005, 2006, 2009, 2010 y 2011, tendrán oportunidad de repetir en este 2014.

Curiosamente, Hopkins High School se hizo famoso en el mundo entero en 2005 cuando en la final estatal, Blake Hoffarber anotaba en el último segundo una de las canastas más memorables de la historia del baloncesto:

youtube://v/MJoxGpEswOI

Aunque la de Hoffarber valía un título, ahora Coffey inscribe también su nombre en la historia del instituto con su triple sobre la bocina, y que se recordará aún más si consiguen ganar la final llevándose el campeonato del estado de Minnesota.