Parece que esta no va a ser la temporada para el Canadian Solar, el histórico Virtus Bologna. Tras el fracaso en las negociaciones para incorporar a Kobe Bryant y Manu Ginobili ahora ha irrumpido un conflicto doméstico que puede dejar tocado al club.

El pívot estadounidense con pasaporte búlgaro, Jared Homan, ha sido expulsado del equipo después de haber golpeado a su entrenador, Alex Finelli, y causarle una herida. Los hechos ocurrieron en una sesión de entrenamiento y la sentencia del club, según apunta Il Corriere dello sport, ha sido la salida del jugador. El mismo rotativo italiano apunta a Benjamin Eze, que jugó la temporada pasada en Milano, como sustituto. También se ha especulado con el pívot austriaco del Cantù, Benjamin Ortner (2.06 y 28 años), que esta temporada está teniendo menos protagonismo que la anterior. 

Jared Homan (2.08 y 28 años) estaba siendo uno de los jugadores más importantes de la competición, con promedios de 15.3 puntos, 10 rebotes y 1.8 recuperaciones. Actualmente es el tercer máximo reboteador tras Linton Johnson III (Avellino) y Jeff Adrien (Benetton). Homan -que solía conducir un tractor propieadad de sus padres en su Iowa natal- ha disputado toda su trayectoria profesional en Europa, desde que abandonara la Universidad de Iowa con una licenciatura en Finanzas (es un experto en Matemáticas). Grecia, Polonia, Turquía, Croacia y de nuevo Grecia fueron sus destinos antes de llegar la temporada pasada a la capital universitaria europea. Homan obtuvo la nacionalización búlgara y llegó a jugar con su selección en los encuentros de calificación para el Europeo del 2010.

Este es el resumen del último partido jugado contra el Vanoli Cremona.

En la NBA encontramos un caso parecido hace ya más de una década. La entonces estrella de los Warriors, Latrell Sprewell agarró por el cuello a su entrenador, PJ Carlesimo, durante 10 segundos hasta que fue separado por sus compañeros. Sprewell fue, primero, sancionado sin sueldo pero luego se le rescindió el contrato. Más tarde emprendería el camino que años antes hizo Chris Mullin, pero a la inversa: de California a New York. Allí se consolidó como uno de los mejores jugadores de la liga.