Peker llegó con el cartel de rocoso pívot capaz de frenar a los mejores interiores de la Euroliga, pero desde su llegada su juego se diluyó para quedar en unos números pobres (no llegan a 6 puntos y 4 rebotes por partido) y una participación que fue a menos, disputando sólo dos partidos en las eliminatorias de playoff.
De esta manera, el Baskonia decidió no seguir contando con él esta temporada, llegando a un acuerdo para la rescisión de su contrato la semana pasada. Ahora, Peker deberá volver a recuperar el caché perdido en la TBL (primera división turca).