Kevin Punter está en boca de todos por la probable salida de Partizan.

Punter fue uno de los invitados al podcast promovido por la Turkish Airlines Euoleague el pasado mes de Enero, llamado Un cuarto con Kyle Hines. En él, actual escolta del Partizan de Belgrado tiene una conversación con el cuatro veces campeón de la Euroliga Kyle Hines. Un podcast en el que los jugadores van más allá del baloncesto sobre la pista y se abren con la ya leyenda del baloncesto europeo a base de preguntas rápidas que se les lanzan.

En esta ocasión, uno de los aspectos más destcados del episodio fue el ritual prepartido que sigue Punter, fruto de la superstición. El jugador contó, terminando el podcast, que siempre trata de evitar, a toda costa, que sus palmas de la mano tengan contacto con otros compañeros o personas. Para sorpresa de Hines, que fue su compañero en el entonces llamado AX Armani Exchange Milan, nunca se había percatado de este hábito.

Cuando Hines introdujo el tema de las supersticiones prepartido, Punter fue claro: “Después de terminar de tirar o cuando ya he acabado de calentar y esas cosas, no se me puede tocar el interior de mis manos“, dijo. “Ninguna de mis palmas, no la spuedes tocar.“

Con razón, para Punter, si sigue esta manía será por algo. Y es que alguien que compite varias veces, semana tras semana y que debe rendir como él hace, este tipo de asuntos pueden ser importantes. La temporada pasada fue el pilar anotador del gran proyecto que se creó en Belgrado para jugar en Eurocup, promediando 16.2 puntos, pero sus porcentajes de 3 bajaron drásticamente en esa campaña. Sin embargo, esta temporada, en la máxima competición continental, Punter aporta de media 15.8 puntos con un recuperado 41.4% de acierto en triples. Su mejor temporada en este aspecto en la 19-20 con el Estrella Roja, donde registraría un tremendo 47.7% desde el perímetro. Tras esa campaña, el Milán pondría el ojo en él para unir fuerzas con, precisamente, Hines.

Foto de portada: Euroleague Basketball