Anthony Randolph volvió con ganas y acierto para juntar otra vez la mejor pareja de cuatros en ataque. El ala-pívot zurdo salió de inicio y con la mano caliente. Anotó 13 de los 21 puntos del Real Madrid en el primer cuarto, manteniendo a su equipo arriba mientras sus compañeros habían comenzado con la pólvora mojada. Acabó con 19 puntos y 23 de valoración, a pesar de jugar solo 21 minutos, dando la sensación que Laso no quería forzarlo. Tampoco fue un problema, ya que Thompkins se fue a 12 y 19, confirmando lo que ya hemos comentado muchas veces y es que cuesta imaginar una pareja de ala-pívots con más calidad en ataque.

El As Wilbekin no gana al repoker. El jugón de Maccabi celebró su renovación con otro gran partido. No comenzó acertado en el tiro, pero luego lo mejoró para acabar con 21 puntos, 4 de 10 en triples y 22 de valoración. Pero estuvo muy solo en cuanto a individualidades, ya que ningún otro compañero sumó dobles dígitos en valoración o puntos. Es cierto que el juego de los de Sfairopoulos fue muy coral, ya que 11 jugadores sumaron algún punto, pero fue insuficiente ante el quinteto del Madrid formado por el Facu, Randolph, Thompkins, Tavares y  Causeur todos ellos superando la decena en créditos y anotación.

Esa extraña pareja formada por el Facu y Tavares. Ninguno de los dos comenzó el partido brillando, pero si aportando en su faceta más destacada. El más pequeño sumaba asistencias a pesar de no anotar, mientras el gigante solo destacaba en tapones, pero acabó siendo una auténtica muralla con 5. Pero en la segunda parte, además ya completaron su juego, con el caboverdiano machando el aro y reboteando en la zona y el argentino anotando 9 de los últimos 11 puntos de su equipo para finiquitar el partido.

El Real Madrid tenía ante si la posibilidad de establecer la peor racha en Euroliga de la era Laso con cuatro derrotas seguidas y visitaba a un Maccabi invicto en Tel Aviv. Pero la vuelta con mayúsculas de Randolph fue la mejor noticia. El americano anotó 13 de los 21 puntos de su equipo, acompañado por los 6 de Causeur y 2 de Tavares, sin que nadie más aportara puntos. Wilbekin lideró a los locales con 8 y tuvo algo más de compañía, pero no la suficiente para irse arriba en el marcador (19-21).

La entrada de los suplente favoreción a Maccabi, con Jackson, Acy y sobre todo Avdija creando problemas a la defensa blanca y llevando la iniciativa para los suyos en el marcador. A los de Laso se le cerraron las vías de anotación, algo lógico al no ver ningún punto en el casillero de Campazzo, Rudy y Llull. Amare se estrenó en la Euroliga y el luminoso al descanso mostraba un 38 a 36.

La segunda parte arrancó con la primera canasta del Facu y con uno de esos momentos Causeur. Tavares se unía a la fiesta en ataque mientras taponaba todo lo que le pasaba cerca mientras Randolph seguía acertado y con ese poker los merengues pusieron las máximas ventajas en 10 (44-54). Wilbekin recuperó el toque de muñeca a través de tiros libres, siempre de tres en tres, tras haber fallado cinco triples seguidos y acercó a los suyos pero Tavares y sus cinco tapones eran demasiado para Maccabi.

El jugón nacionalizado turco puso el 52 a 57 con su tercer triple, tras los dos del inicio, y dos aciertos de tres de Cohen metieron el miedo en el cuerpo a los campeones ACB (58-59). Pero Thompkins y Llull sacaron su calidad y carácter  para volver a distancias. Hunter y Tavares intercambiaban canastas pero otra vez el protagonismo era para Wilbekin y esta vez era Acy quien lo secundaba desde la línea (66-68). Thompkins anotaba dos libres y a partir de ahí solo había hueco en la parte de puntos del acta para el Facu. El argentino absorvía el juego y las faltas y sumaba 9 puntos consecutivos para cercenar las esperanzas de remotanda de los de Sfairopoulos, que lo intentaban hasta el final pero se quedaban cortos a pesar de los dos triples seguidos de Dorsey.