La ciudad de Málaga, con el Palacio de Deportes José María Martín Carpena, se ha impuesto a la de Jerusalén y la FIBA así lo ha anunciado tras la reunión del comité ejecutivo de la FIBA reunido en Suiza. La elección de la ciudad de la Costa del Sol era la favorita por varios factores de peso, cogiendo el testigo de Bilbao, comenzando por elemento de la seguridad, encontrando Israel una inestabilidad reinante desde hace tiempo por el conflicto con Palestina. 

Otro de los grandes elementos ha sido la mejor localización de la Málaga y mejor oferta hotelera y de restauración, pese a que el Gobierno de Israel triplicaba la oferta a la ofrecida por la Junta de Andalucía. Unicaja ejercerá de anfitrión y será un factor clave para la fase final, tras proclamarse en Badalona como campeones de la Copa del Rey. El equipo de Ibón Navarro fueron los primeros en certificar billete para la Final Four después de barrer 2-0 a UCAM Murcia de Sito Alonso. 

Los otros tres equipos que pondrán rumbó a la ciudad andaluza son los alemanes de Telekom Bonn, que vencieron a SIG Strasbourg, añadiendo a Hapoel Yahav de Jerusalén, que ganaron también 2-1 a AEK. El cuarto contendiente son Lenovo Tenerife, que derrotaron 2-1 a Baxi Manresa, siendo los actuales campeones de la BCL.

La final a cuatro se disputará el 12 de mayo las semifinales, siendo el momento culminante el domingo 14 para el partido por el tercer y cuarto puesto y la gran final del torneo europeo. El sorteo de los emparejamientos se llevará a cabo el 25 de abril en Málaga

Pero en última instancia, elegimos Málaga como el destino que va más allá de garantizar que la Final Four de BCL de 2023 sea un evento exitoso. Elegimos Málaga y Unicaja porque la dedicación, el entusiasmo y la convergencia de los aficionados con su equipo han escalado nuevas alturas esta temporada, especialmente después de la conquista de la Copa del Rey. Se convencieron de que su energía convertirá la Final Four de 2023 en el tipo de evento de legado que deja un sello no comestible en la ciudad, la región y la comunidad local“, comentó Patrick Comninos, CEO de la Champions League.