INTERCAMBIO DE GOLPES EN EL COMBATE SATO VS TRAORÉ: Valencia Basket y Limoges se medían en la tercera jornada del Last 32 de la Eurocup en un encuentro que podía dejar a los taronja con pie y medio en octavos mientras que para los franceses era casi la última bala para seguir con opciones de clasificar. Y el partido comenzó trastabillado. Nadie era capaz de imponer su ritmo, nadie era capaz de encontrar el aro con facilidad y entre los errores y el desacierto en el tiro, dos hombres consiguieron agitar el marcador.
En el lado local fue Romain Sato quien vio el aro con mayor facilidad. El alero anotaba cerca del aro y con un 3-4 en tiros de 2 era el único taronja que podía sumar de forma continuada. Y es que más allá de Sato, Valencia Basket solo anotó dos canastas más en juego: una de Guillem Vives y otra de Justin Hamilton. Pero tampoco le iban mejor las cosas a Limoges. En el lado francés, Ali Traoré fue el protagonista. La entrada de Bo McCalebb mejoró la fluidez ofensiva de Limoges y Traoré se beneficio haciéndose grande en la pintura para terminar con 8 puntos y manteniendo por delante a su equipo (15-21).
VIVES Y DUBLJEVIC REACTIVAN A VALENCIA BASKET: En el segundo cuarto, Valencia Basket consiguió añadir una marcha más a su intensidad en el juego y la entrada de Guillem Vives ayudó a un movimiento de balón más fluido. Además, Vives frenaba a McCalebb y era capaz de frenar a Limoges. Y si Vives trabaja en la dirección y en la defensa, Bojan Dubljevic dominaba la zona. En el segundo cuarto, Dubljevic anotó 9 de sus 16 puntos para liderar un parcial de 14-6 que apretaba el marcador.
Pero mientras Vives y Dubljevic despertaban, Nobel Boungou-Colo empezaba a construir su espectacular partido. Aunque los focos se fueron hacia los dos 2+1 consecutivos de Bo McCalebb aprovechando la defensa de Antoine Diot, Boungou-Colo era el asesino silencioso que terminaría por reventar el partido y que mantenía todo apretado de cara a la segunda parte (44-44).
LUCIC SUBE LA INTENSIDAD ATRÁS EN EL CAMPO DE BATALLA: Tras el paso por vestuarios, Limoges subió su intensidad en defensa y para contrarrestarlo, Pedro Martínez dio entrada a Vladimir Lucic. Con el juego físico marcado el devenir del partido, la Fuente de San Luis se convirtió en un bonito campo de batalla en el que había que adaptarse al criterio arbitral. Si Limoges subía, Valencia Basket también lo hacía. Pero en un combate cuerpo a cuerpo ante un equipo galo tienes las de perder y eso terminó pasándole factura al conjunto taronja. Tanto, que el cansancio empezaba a hacer mella mientras los franceses aprovechaban su idílica relación con el 6,75 para, liderados como no podía ser de otra manera por Boungou-Colo, irse con una ventaja de 7 puntos al último cuarto (58-65).
WILL DANIELS – BOUNGOU-COLO, LA PESADILLA TARONJA: Boungou-Colo se estaba exhibiendo en la Fuente de San Luis, pero un solo hombre no era suficiente para doblegar al conjunto taronja pese a la ventaja de 7 puntos. Por eso, Will Daniels apareció en su ayuda siendo otro de los máximos exponentes del acierto exterior de Limoges. Daniels convertía cada acción en canasta y entre los dos hicieron la ventaja fuera aumentando hasta los 20 puntos finales. Y es que mientras Limoges se crecía, Valencia Basket, agotado, se hundía y tiraba la toalla a falta de 3 minutos para el final del encuentro (72-92).
LLEGÓ LA PRIMERA DERROTA DE VALENCIA BASKET: Antes de medirse al Barça Lassa por el liderato de la ACB, Valencia Basket conoció el amargo sabor de la derrota por primera vez en lo que llevamos de temporada. Con un Limoges muy físico que estrenaba entrenador, Dusko Vujosevic, los taronja se quedaron sin gasolina y frenaron su espectacular racha en 28 triunfos consecutivos.