La actualidad rusa está al rojo vivo. Después de la renovación de Papaloukas con el CSKA por tres años, la Superleague rusa hizo públicas los nuevos cupos que regirán las plantillas de los equipos el año que viene.

Se dividirá a los jugadores en tres tipos:

  • Categoría R: son jugadores seleccionables, es decir, en este grupo se entra si y sólo si se puede ser convocado por el equipo nacional ruso, por ejemplo Holden o Panov. Se permite tener hasta los 12 jugadores de la plantilla de categoría R.
  • Categoría E: jugadores que cuentan con pasaporte de un país miembro de FIBA Europe y no puede jugar con la selección rusa, como Papaloukas. No se podrá tener más de 5 jugadores E en la plantilla.
  • Categoría A: jugadores no europeos que tampoco pueden jugar con el combinado nacional, dirigido por David Blatt, como David Vanterpool. Sólo se podrá tener dos jugadores A en el equipo.

Hasta aquí el sistema recuerda bastante al vigente en la ACB. La diferencia llega con la siguiente norma: “En todo momento deberá haber, al menos, dos jugadores rusos en la pista“, por lo que los posibles quintetos se reducen ostensiblemente y los jugadores nacionales se revalorizan mucho.

Mientras tanto, los equipos rusos preparan la temporada incorporando a los pilares que deberán sostenerlos el año que viene. El mítico Valdemaras Homicius ha sido elegido por Antanas Sireikas (ex-entrenador del Zalgiris) como su asistente para compartir banquillo en el Ural Great.

Por su parte, el ex-NBA y ex-Baskonia (entre otros), Jerome Allen, ha llegado a un acuerdo con el Dynamo St Petersburg y reemplazará a Jerry McCullough (ocupará una de sus plazas A), y el Dinamo Moscow Region firmo al lituano Giedrus Gustas tras promediar 15,3 puntos por noche en el Lokomotiv Rostov el año pasado.