El Panathinaikos de Atenas venció al Tau Cerámica Baskonia en el pabellón Olímpico del O.A.K.A., en un partido que se decidió en los últimos cuatro minutos gracias a un parcial de 12-2 en ese tiempo. Con esta victoria el equipo del trébol mantiene el factor cancha, mientras que el equipo vitoriano se complica la vida, y ahora tendrá que vencer este jueves en el Buesa Arena e intentar sobreponerse al espectacular ambiente del pabellón heleno, donde en el caso de llegar al tercer partido, seguro que volverán a llenar las 18.000 plazas del recinto del “PAO”.

Fue un partido bonito, e igualado, exceptuando el comienzo y el fin, entre dos grandes equipos, que ya el año pasado se cruzaron cuatro veces, y que jugaron la final four de Moscú. El Panathinaikos salió muy fuerte imponiendo una excelente defensa a toda pista, que dificultaba de sobremanera a Prigioni que controlará el tempo del ataque de su equipo. Además gracias esta defensa y a la excelente defensa de las líneas de pase, y de los interiores que no podían recibir un solo balón, el conjunto heleno logró forzar muchas pérdidas (al final del partido 24) y lanzar contraataques rápidos bien finalizados para conseguir a los siete minutos de partido un parcial de 19-8. Ahí es cuando irrumpió en el parqué Tiago Splitter, y el Tau subió su nivel defensivo, y comenzó a enviar algunos balones interiores al pívot brasileño, y ha sacar algunas ventajas interiores, que hoy no podía sacar en el pick and roll, denegado por la defensa de los de Obradovic. Hansen anotó tres triples, dos de ellos en los últimos minutos del cuarto que lo dejaron en un 24-21, tras un parcial de 5-13.

El segundo cuarto comenzó con dos jugadas de tres puntos de ambos equipos, Splitter seguía dominando ambas zonas, pero el Panathinaikos volvió a encontrar su ritmo ofensivo para volverse a escapar en el luminoso. Ahí es cuando Perasovic estableció una defensa zonal que ya se le atragantó este domingo al Real Madrid, y que ahora también se le atragantaba a un Panathinaikos que a pesar de encontrar hombres abiertos con tiros claros, no dejaba de fallar desde la línea de seis veinticinco. El Baskonia conseguía empatar el encuentro a 35, con un triple del base reserva en Euroliga Lionel Chalmers, que había entrado a pista a consecuencia de las tres faltas de Prigioni. A partir de aquí solo malas noticias para el Baskonia, que encajaba un parcial de 7-0, y además se cobraba la tercera falta de Scola y de Hansen, y tras los primeros veinte minutos se fueron con 15 pérdidas.

El segundo tiempo comenzó con intercambio de canastas entre ambos equipos, el conjunto ateniense fabricando ventajas en la penetración, y el Tau sacándolas en el juego interior. Splitter y Lakovic seguían a lo suyo, uno anotando 2+1, y el otro fallando triples, ya llevaba seis. Los vitorianos se acercaron gracias a la zona planteada por Perasovic, aunque más por demérito de los griegos que seguían fallando triples en posiciones cómodas, hasta el punto de volver a empatar el marcador a 58 puntos. Un triple de Vlado Scepanovic dejaba el marcador en 58-61, con diez minutos por jugar.

Un flojo Diamantidis, iniciaba el cuarto definitivo con una canasta. Mientras tanto en el otro lado de la pista, Luis Scola se echaba encima al Tau, a pesar de los tres contra uno que le planteaba la defensa del “PAO” cada vez que recibía debajo de canasta. Jaka Lakovic encestó su único triple con todavía seis minutos por jugar, mientras que Scola podía con todos sus pares en el ataque baskonista, lo que situó el partido con un apretado 72-70 a falta de cuatro minutos por jugar, el cual sería un punto de inflexión. Scepanovic, líder de la victoria helena en la sombra, volvía a dar un respiro a su equipo, el cual ya sería decisivo. Los del trébol subieron su nivel defensivo, y el Tau ya no fue capaz de encontrar soluciones ofensivas. Para más INRI, Tomasevic anotó sus tiros libres, y Mike Batiste, anotó un triple con carambola incluida, que dejaban el partido visto para sentencia, con el definitivo 84-72.

Destacar la buena dirección de Vassilis Spanoulis con seis asistencias y trece puntos. También tuvo un papel importante el ex del Tau Dejan Tomasevic, que anotó los tiros libres al final, y que fue el único que fue dio problemas en defensa a Tiago Splitter. A destacar en el bando baskonista, el buen papel de sus interiores, y de Travis Hansen, y el caso de Jacobsen que salió de titular y no jugó más que cinco minutos.

Obradovic destacó, el trabajo defensivo de sus jugadores que permitieron forzar un total de 24 pérdidas al rival. Un aspecto que cree que podía haber sido un problema es que “fallamos muchos tiros abiertos” .

Velimir Perasovic a parte de quejarse de las pérdidas de su equipo, no cree que su equipo rindiera en algunos casos en ataque por debajo de sus posibilidades por culpa de la defensa de los verdes, sino por “la mentalidad de los árbitros permitiendo más contactos y defender mucho más fuerte a ellos que a nosotros” .