A la décima fue a la vencida. Veljko Mrsic sumó su primera victoria dirigiendo a los Hombres de Negro de forma solvente ante el Partizan en un duelo de necesitados. Ambos conjuntos llegaban bajo mínimos a la cita con los bilbaínos encadenando 9 derrotas consecutivas y los serbios con una sola victoria en otros tantos compromisos.

El encuentro comenzaba con ritmo intermitente por parte ambos contendientes y con un joven destacando por encima del resto. Nigel Williams-Goss avisaba en los albores del encuentro con un triple lejano sobre la bocina de la primera posesión y llegando a sumar 9 puntos y hasta 15 créditos de valoración en 6 escasos minutos sobre el parqué. Sin embargo, eran los visitantes los que se apuntaban el primer cuarto (18-22) con un juego mucho más coral con hasta 7 jugadores implicados en la anotación.

Lucio Redivo se presentaba en sociedad con 8 puntos sin fallo prácticamente consecutivos y Javi Salgado replicaba con sendos triples para liderar un parcial de 1-10 que obligaba a Aleksandar Matovic, debutante en el banquillo tras la marcha de Miroslav Nikolic, a pedir tiempo muerto. El Partizan se deshacía en defensa y se mostraba romo de cara al aro, coyuntura que los de Mrsic aprovechaban para encontrar opciones fáciles en ataque. Los serbios anotaban tan sólo 12 puntos en todo el segundo cuarto y su escaso acierto les mandaba al descanso con un déficit de 8 tantos (30-38).

El paso por vestuarios no sentaba nada bien a los de Veljko Mrsic y en 4 minutos Patrick Miller reseteaba el encuentro (40-40). Se entraba entonces en una nueva fase con ambos conjuntos enlazando varias acciones imprecisas hasta que Ricardo Fisher tomaba las riendas ante la ausencia de Jonathan Tabu y comandaba otro parcial de 1-10 que daba alas a los bilbaínos (43-50).

Ya en el acto final el RETABet Bilbao Basket salía en tromba y se mostraba más certero desde más allá del arco. Redivo se desataba en ataque, Mickell Gladness se gustaba en un mate digno de cualquier "top" y un triple de Axel Hervelle ponía el +15 a falta de 6 minutos para la conclusión (50-65) y dejaba el encuentro visto para sentencia ante la impotencia del Partizan.

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Juego coral: Hasta 22 asistencias repartieron los Hombres de Negro por sólo 6 del Partizan pero es que 5 de ellas salieron además de las manos de un Nigel Williams-Goss muy solo. La circulación del balón brilló por su ausencia en los locales y se encontraron enfrente a un rival más clarividente y que planteó un juego mucho más comprometido coralmente. 

Estirón final: El último cuarto se cerró con un parcial de 18-30 favorable a los bilbaínos y que sepultó todas las opciones serbias. Hasta 5 triples sumaron los visitantes en el período final para dinamitar un encuentro que se presentaba abierto al término del tercero (47-53).

Factor Redivo: El argentino pasó seguramente bajo el radar de los serbios y demostró por fin parte de la dinamita que se le presuponía tras una impactante pretemporada. 20 puntos y 5 rebotes para igualar su mejor marca anotadora como Hombre de Negro y con un 77% de acierto (7/9) en tiros de 2.