Comenzaba el partido con los Hombres de Negro buscando imponer su intensidad y su ritmo al partido, y lo conseguían en un inicio, sin embargo, un Limoges que iba de menos a más igualaba el encuentro. Los bilbaínos sufrían con pérdidas de balón no forzadas que permitían canastas sencillas de los franceses, que les permitían marcharse con ventaja en el marcador (22-20). Salían con hambre los de Kyle Milling, apretaban a los de Mrsic y conseguían un parcial de 8-0 de inicio que complicaba la tarea, el físico y la intensidad defensiva de los galos marcaba diferencias y, además, conseguían anotar con comodidad desde más allá del arco. RETAbet Bilbao Basket tenía problemas con la transición defensiva y Limoges iba ganando en confianza, a medida que se minaba la de los visitantes (46-30).

Tras el paso por vestuarios salían más activos los Hombres de Negro, que trataban de reactivar sus sensaciones del inicio de partido. Pero Limoges se encontraba muy cómodo sobre el parquet, y contestaba rápidamente a cualquier intento de remontada bilbaíno. Pero RETAbet Bilbao Basket había salido con el convencimiento de que su trabajo le permitiría recortar distancias, y con Pere Tomás liderando en ambos lados del campo conseguían disminuir las renta a la barrera psicológica de los 10 puntos. Volvía parte de la confianza de los bilbaínos, que fruncían el ceño para activar su instinto de supervivencia (62-53). Limoges activaba de nuevo su mejor versión defensiva y cortocircuitaba a los de Veljko Mrsic con un parcial de 9-0 que parecía poner fin al encuentro. Los galos disfrutaban ante el despropósito defensivo bilbaíno, que veía como ametrallaban su propio aro una y otra vez. Al final, los galos gestionaban sus rentas en los últimos minutos y sumaban una derrota más a la dolorosa mochila que transportan los Hombres de Negro (86-74).

Un segundo cuarto para olvidar: Tras un primer cuarto en el que la intensidad bilbaína les ha permitido controlar el ritmo de juego por momentos, los bilbaínos se han deshecho como un auténtico azucarillo ante el empuje y el físico del conjunto galo. En un segundo cuarto para olvidar, las pérdidas y las malas transiciones defensivas han resultado una losa demasiado grande.

El físico y la intensidad de los galos: El equipo de Kyle Milling marca diferencias desde la exuberancia defensiva, la intensidad y el empuje. Defensivamente han brillado por momentos, y han colapsado los ataques bilbaínos. Además, cuando RETAbet Bilbao Basket ha lanzado su conato de remontada, no han dudado en contestar con poderío defensivo y ametrallando desde el triple para terminar de matar el encuentro.

Los problemas mentales de los Hombres de Negro: RETAbet Bilbao Basket se está mostrando como un equipo muy débil a nivel mental, que sufre en exceso en cuanto el rival es capaz de conectar algún parcial positivo. El conjunto bilbaíno, que hoy sumaba su octava derrota consecutiva, está pasando por un momento realmente complejo que Veljko Mrsic tendrá que ser capaz de solucionar.