La jornada del jueves de Euroliga finalizó con un lamentable incidente en el encuentro entre el Zalgiris y el Real Madrid disputado en Kaunas y que acabó con victoria del conjunto blanco en la prórroga. Tras el partido dos aficionados del conjunto lituano trataron de agredir a Rudy Fernández cuando se dirigía al autobús del equipo para emprender el camino de regreso a Madrid.

El escolta mallorquín, que fue centro de las iras de los aficionados del Zalgiris por su comportamiento en el encuentro de ida, cayó al suelo por la conducta de estos aficionados aunque no sufrió ninguna lesión gracias a la intervención de un miembro de seguridad contratado por el conjunto madrileño que sí fue golpeado. El Real Madrid denunció la situación en una comisaría y los dos conocidos aficionados del Zalgiris fueron detenidos por la policía tras resistirse. Los agentes necesitaron utilizar una descarga eléctrica para reducirles según apuntan medios lituanos. Los agresores son famosos en Kaunas por haber renunciado a la ciudadanía letona y haberse nacionalizado lituanos como muestra de su pasión por el Zalgiris.

Rudy Fernández tuvo que soportar cómo en cada acción del encuentro era abucheado por los aficionados lituanos y en el pabellón colgaban habían pancartas contra él. El club blanco espera que haya una dura sanción por parte de la Euroleague contra el conjunto de Kaunas porque apenas existía seguridad en la salida de los jugadores del Real Madrid.

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