Resultados: 

Conferencia Oeste, 

Grupo A

  • Paris Levallois (3-3) – CAI Zaragoza (2-4) 90-87

Grupo C

  • Virtus Roma (5-1) – Spirou Charleroi (1-5) 100-69

Conferencia Este

Grupo E

  • Partizan Belgrado (1-5) – Lietuvos Ritas (5-1) 76-85

Podría decirse que una de las virtudes del CAI Zaragoza es que conoce perfectamente cuales son sus defectos; principalmente dos: falta de concentración por momentos y debilidad en el rebote. Esto sería bueno si no se empeñara en ahondar en ellos partido tras partido, aunque solo sea por momentos. Así empezó el partido en París, o mejor dicho en Levallois, a las afueras de la capital. Una vez más, el equipo maño mostró su versión más apática en el comienzo, algo que se tradujo en una pasividad defensiva alarmante y en serias dificultades para competir el rebote a su rival; razones por las cuales Paris Levallois se frotaba las manos, especialmente Green y Labeyrie, mejores anotador y reboteador del equipo galo respectivamente. Lo cierto es que los aragoneses recuperaban en ataque lo que perdían en defensa y pese a finalizar el primer periodo por debajo, los números en ataque eran aceptables, gracias especialmente a un Pere Tomàs que se reivindica cada partido. 30-21 tras los diez primeros minutos.

La entrada de los serbios Katic y Jelovac en el juego interior del CAI mejoró notablemente la intensidad del equipo; dando muestra de estar plenamente recuperados de sus respectivas dolencias, se convertían en los dos mejores del equipo, aprovechando además la dirección de Llompart, que buscaba una y otra vez a sus hombres grandes en ataque. Mejoró el equipo rojillo en los dos lados de la cancha, también y muy especialmente en la defensa, que pasó de encajar 31 puntos en el primer periodo a tan solo 13 en el segundo, que sin embargo, no servían para darle la vuelta al marcador, que se iba al descanso con ventaja para Paris Levallois por 44-43.

La remontada quedaba culminada en la reanudación tras dos triples seguidos de Lisch, en unos primeros minutos en el que ambos equipos anotaban con tremenda facilidad. Lo hacía el CAI pero también el Paris Levallois, que se sumaba al festival anotando triples de tremenda dificultad lo que le hacía volver a ponerse por delante. Los aragoneses cambiaban la pareja serbia por otra un poco más exótica, la combinación de Lisch y Goulding que eran los únicos anotadores del equipo maño en el comienzo del tercer cuarto. El intercambio de canastas se convertía en cambio de liderazgo en el electrónico. Paris Levallois se mantenía muy vivo en el partido en parte gracias al talento de Schilb, un verso libre que demostraba andar sobrado de calidad en cada posesión. Un último minuto defectuoso del CAI le hacía encajar un 7-0 de parcial que ampliaba la ventaja del equipo francés hasta el 70-63 con el que se cerraba el tercer tiempo.

Comenzaba el último cuarto con triple de Llompart, algo que se encuentra en serio peligro de extinción. Más habitual, y ya comentada, la dificultad del CAI para cerrar el rebote defensivo, algo que le costó volver a encajar las dos primeras canastas del parcial definitivo. Ruiz Lorente movía piezas para jugar con doble base, Pere Tomàs en el tres y Landry en el cuatro; algo que funcionó de primeras con rebote ofensivo del alero balear y triple del norteamericano, pero que le costó encajar otro parcial negativo que elevaba la ventaja del conjunto francés hasta los ocho puntos. El CAI retomaba un esquema más habitual, con Lisch de base acompañado por Goulding como dos, Tomàs como tres y sin cinco puro haciendo pareja interior Landry y Jelovac. Precisamente Landry iba a ser el más destacado por momentos con dos triples importantes. Y es que el problema no estaba tanto en ataque como en defensa, los aragoneses volvían a encajar otro parcial, 5-0 en esta ocasión que dejaba el partido prácticamente decidido a 1:10 para el final. El partido, que parecía decidido, enloqueció en los últimos instantes en los que el CAI parecía luchar únicamente por salvar el average. Sin embargo, los errores del equipo francés y la determinación de los rojillos ponían el electrónico con 89-87 a 12 segundos para el final. Quedaba todavía lo mejor, un robo de Landry que se iba a por el aro con todo y se encontraba con un tapón espectacular de Sane que llegaba por detrás y un fallo de Lisch posterior. Schilb cerraba el partido anotando un tiro libre para poner el definitivo 90-87 en el marcador.

El resto de la jornada 

Otros dos partidos se adelantaron en la jornada de la Eurocup. Ambos tenían un pronóstico claro a priori, pues se enfrentaban líderes y colistas de los grupos. 

En la Conferencia Oeste y en el Grupo C, el de Baloncesto Sevilla, Virtus Roma no tuvo problemas para deshacerse del Proximus Spirou Charleroi. Lo cierto es que el partido fue más igualado de lo que demuestra el marcador final, con un +31 para los italianos, renta que se amasó principalmente en el último cuarto, en el que el equipo belga se vino abajo por completo, encajando un parcial de 30-13. Hasta siete jugadores del equipo romano superaron los diez puntos, con especial atención a los 19 de Jones y los 17 de Morgan

Más igualado incluso fue el partido del Grupo E, en la Conferencia Este, entre Partizan y Lietuvos Ritas. El equipo lituano liderado por Kavaliauskas (23 puntos) y Orelik (21), logró la victoria ganando por la mínima tres de los cuatro cuartos -el tercero lo empató a 26-. No fueron suficiente por contra los 22 puntos de Macvan, demasiado solo en la anotación del equipo serbio.