Real Madrid disputara por tercer año consecutivo el partido final por ser campeón de Euroliga y ya saben lo que dicen de la tercera… El éxito de los de Pablo Laso se basó en uno de los mejores cuartos que se recuerdan en la historia de la Final Four de la Euroliga. Un segundo cuarto absolutamente perfecto, en el que los locales consiguieron irse al vestuario con 20 puntos de ventaja, con 35-14, en el que estuvieron tocados por la varita de los Dioses. El primer tiempo acabó con un Ayón con 27 de valoración y un Rivers ejecutor con 4 de 4 en triples y sobre todo ¡18 asistencias de equipo y 0 pérdidas! El movimiento de balón, la velocidad y la ejecución fue maravillosamente perfecta, llevando a un brillantísimo Real Madrid a ganar por 96 a 87 al Fenerbahçe de Zeljko Obradovic. Gustavo Ayón fue el mejor del partido con 18 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias y 3 robos para 30 de valoración. Por los turcos Jan Vesely fue el mejor con 20 puntos y 6 rebotes para 31 de valoración. Real Madrid empató además el récord de triples en una Final Four con 14 triples. 

El partido daba la impresión de estar celebrándose en el Fenerbahçe Ulker Arena en vez de en la cancha del propio Real Madrid. La excitación propia de estos partidos llevaba a ambos equipos ha compartir imprecisiones. Dos detalles en el inicio, Obradovic dejaría al Mvp Bjelica en el banquillo de inicio, entrando Zoric en su posición y anotando la primera canasta de la historia del Fenerbahçe en una Final Four. El ritmo era trepidante, el acierto no tanto, pero la velocidad sobre la pista era bien diferente a la de la primera semifinal.  Fenerbahçe empezó dominando la pintura, mientras Real Madrid comandaba en el juego exterior con un Rudy enchufado.

El showtime llegaría pronto, con un triple sobre la bocina estratosférico del Chacho que ponía a los merengues por encima y los vuelos sin motor de Vesely -8 puntos y 4 rebotes en el primer tiempo-, que hacía tremendo daño con su apertura de espacios en pista con Bjelica a la vez en pista. El Pick and Roll hacía que los turcos endosaran un parcial final de 2-6 para acabar 20-21 el primer cuarto

Real Madrid salió al segundo cuarto con la intención de marcar terreno. ¿Quién es el experto en estas lides? ¿Quién juega en Madrid? Preguntas que aclaraba un exuberante  Andrés Nocioni en ambas partes, sacando a su par y al equipo contrario de ritmo y siendo una amenaza constante en ataque. El equilibrio de espacios de Fenerbahçe se desvanecía con Vesely fuera –por un Erden perdido por la Gran Vía al parecer- , que duraba minuto y medio en el banco. 9-0 para los merengues que  daban una máxima de 8 puntos al Madrid, con un Ayón -16 puntos, 5 rebotes, 3 robos, 4 asistencias para 27 de valoración al descanso- que ya llevaba 14 puntos y dominaba el partido cerca del aro, viendo el tremendo agujero negro que tenía ahora Fenerbahçe en su zona.

Real Madrid jugaba a absoluto placer ante el monumental cabreo de un  Obradovic que ya tornaba en morado. Rivers catapultaba a los blancos al 34-23, cerrando un parcial de 14-2. Pero el Madrid seguía tocado por la varita de los dioses, dos triples consecutivos de Nocioni y Rivers respectivamente lanzaban el asunto a un 42-27. A estas alturas los merengues llevaban ya 8 tiros más ejecutados que su rival, que llevaba 7 pérdidas por 0 del Real Madrid, que seguía metiendo y metiendo todos los tiros (53-32), en una auténtica catarata de triples con un  KC Rivers que ya podría tirar de espaldas que iba a anotar igual, sin embargo los tiros venía por un maravilloso movimiento y equilibrio de pases interior-exterior de los de Pablo Laso, que se iba al descanso con 18 asistencia y 0 pérdidas y un contundente 55-35.

El Real Madrid iniciaba el tercer cuarto por todo lo alto cerrando (prácticamente) el partido de forma prematura, por si aún quedaba alguna duda, con un ataque inicial de 6 puntos: triple de Llull, con falta de Fenerbahçe en el intento de rebote y triple seguido de Rudy Fernández para el 61-35, que cerraba el partido de forma rotunda y definitiva. El Real Madrid llegó a tener 27 puntos de ventaja en el tercer cuarto. Casi 25 minutos fueron los que tardaron los locales en cometer su primer pérdida con una falta en ataque de Marcus Slaughter. Fenerbahçe no perdía fe en lo imposible y la palpable relajación madridista hacían que los turcos bajaran de los veinte puntos y mediante dos triples de Bogdanovic y Mahmutoglu, incluso  ponerse a 14 puntos que volvía a resucitar a la afición visitante, además la impresión que daba es que Fenerbahçe había perdonado varias acciones para cerrar aún más el choque.  La calma regresaba cuando en 20 segundos en el final del tercer cuarto Sergio Rodríguez anotaba el triple número 12 para los suyos y Gustavo Ayón un gancho para colocar un 76-57 que ahora ya parecía algo heroico para remontar con 11 minutos por jugar.<

KC Rivers reponía los 20 puntos de ventaja nada más comenzar el cuarto final, con su quinto triple de cinco intentos sellando ya de todas, todas la victoria y el pase para la gran final de los de Pablo Laso, que ya solo tenía que contar minutos hacia atrás para certificar la tercera final disputada en tres años.