Dean Smith conseguía su primer título universitario de la mano de un joven freshman llamado a hacer grandes cosas en la historia del baloncesto. North Carolina se imponía a la Georgetown de Sleepy Floyd y Pat Ewing en el Superdome de New Orleans por un apretado 63-62. Sam Perkins y, sobre todo, James Worthy, eran las estrellas de unos Tar Heels en los que también destacaba el mejor freshman de la Atlantic Coast Conference.
61-62. Georgetown mandaba en el marcador y la táctica de Smith era asegurar un lanzamiento fácil. Michael Jordan presentaría en aquel partido su candidatura a mejor jugador de la historia del baloncesto. Faltaban 17 segundos para el final y el todavía proyecto de estrella decidió el match con un lanzamiento exterior. El último ataque sería todo un despropósito para los Hoyas. Fred Brown pasó el balón erróneamente a James Worthy, sobre el que cometieron falta. La futura estrella de los Lakers falló los tiros libres, pero el triunfo ya estaba asegurado. Worthy ganó el Most Oustanding Player, galardón que premia al mejor jugador de la final, gracias a sus 28 puntos y 4 rebotes, pero todos los objetivos buscaban a Michael Jordan.
El joven talento de Broklynn no fue consciente entonces de la importancia de su canasta.Ya en los vestuarios le preguntó a su compañero Buzz Petersen si su lanz. Uamiento sería recordado por los aficionados. Buzz le dijo: "Has anotado el mejor lanzamiento de tu carrera". Jordan le contestaría con un "el tiempo lo dirá". Años más tarde reconocería que aquel wining shot sería el más importante de su prestigiosa carrera deportiva.
Treinta años de finales universitarias dan para unos cuantos finales apretados decididos en más de una ocasión por personajes mucho más anónimos. Al menos, en cuanto a impacto en el baloncesto profesional se refiere.
The fallecido Lorenzo Charles, casi sin quererlo, surgió como protagonista inesperado y remató con un mate un mal lanzamiento de Derreck Whittenburg (54-52). El legendario The Pit (Albuquerque) vivió una noche inolvidable. Akeem Olajuwon fue elegid mejor jugador de la final gracias a sus 20 puntos y 18 rebotes. Forjaría una carrera profesional de leyenda. Charles, por su parte, tuvo una carrera overseas marcada por momentos altos (Italia) y bajos (España).
Final repleta de grandes jugadores. Por la Indiana de Bobby Knight, Dean Garrett, pero, sobre todo, Steve Alford, el talento universitario sin sitio en el baloncesto NBA. Por Syracuse, el grecoestadounidense con ascendencia libanesa, Ronny Seikaly, el poderoso Derrick Coleman, y el general Sherman Douglas. El tiro decisivo, sin embargo, fue para Keith Smart (21 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes), quien puso el definitivo 74-73. El Superdome de New Orleans repetía como escenario épico. El actual técnico de los Kings consiguió también el Most Oustanding Player. Smart tuvo algunos escarceos en la NBA pero desarrolló su carrera en terriorio overseas (Francia, Filipinas, Venezuela) y en ligas menores del Norte de América.
En el Kingdome de Seattle, Glen Rice, auténtica estrella de los Wolverines, fue toda una pesadilla para los Pirates de PJ Carlesimo. El cañonero de Michigan anotó 31 puntos y se llevó el galardón al mejor jugador del partido, pero el triunfo lo certificó, en la prórroga, el base Rumeal Robinson con dos tiros libres (79-80). Fue el primer y único título para los Wolverines y su entrenador, el interino Steve Fisher. Por Seton Hall destacaron los 35 puntos de John Morton, que acabó liderando la clasificación de máximos anotadores en ACB. Robinson sería elegido en primera ronda del draft por los Hawks, pero no triunfó en la NBA, pasando por diferentes equipos. El base de los Wolveines tuvo muchos problemas con la justicia siendo condenado por fraudes diversos.
En la final del 94, celebrada en Charlotte, surgió de nuevo la figura del lanzamiento decisivo. En este caso fue el escolta de los Razorbacks, Scotty Thurman quien anotó el triple decisivo a falta de 50 segundos para dar el triunfo a los de Nolan Richardson (76-72). Thurman acabó el partido con 15 puntos anotados aunque el mejor jugador del encuentro fue el poderoso Corliss Williamson (23 puntos, 8 rebotes y 2 tapones). Por los derrotados estaba Grant Hill, que compartía protagonismo con el pelirrojo Cherokee Parks. El entonces presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, natural de Arkansas, dio soporte a los suyos en la Final Four. La carrera profesional de Thurman no fue nada exitosa y tras no ser seleccionado en el draft, jugó en ligas tan exóticas como la chipriota o la libanesa, con paradas en Grecia y Macedonia y alguna estancia en la CBA.
Ocurrió en Indianapolis: Miles Simon y Mike Bibby formaron un dúo terrorífico para los Wildcats de Lute Olson, quien conseguía así su primer y único título universitario (79-84). Simon, nacido en Estocolmo, anotó 30 puntos, incluidos dos tiros libres decisivos en el tramo final del partido que certificaban la victoria de Arizona. Esto le valió el Most Outstanding Player. Mike Bibby le complementó con 19 puntos. Mientras Bibby tuvo una época gloriosa con los Kings de Adelman, Simon no tuvo la misma suerte y tras jugar, poco, con los Magic, continuó su trayectoria profesional en Israel e Italia, combinándolo con estancias en la CBA (Dakota Wizards), donde tuvo un especial protagonismo. Fue entrenador asistente de los Wildcats y colabora con la espn.
El Tropicana Field, en Saint Petesburg, sede del equipo de baseball de los Tampa Bay Rays desde el 98, acogió la final del 99 en la que se doctoró Richard ‘RIP’ Hamilton, nombrado mejor jugador. El que fuera campeón de la NBA con los Pistons anotó 27 puntos y sumó 7 rebotes para liderar a los Huskies contra nada menos que un equipo muy compacto en el que destacaban Trajan Langdon, Elton Brand y Shane Battier. Hamilton mantuvo en la lucha a los hombres de Calhoum y Khalid El-Amin (12 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias) decidió desde los tiros libres (77-74). El-Amin tuvo poco recorrido en la NBA (Bulls, Heat), pero no así en Europa. Francia, Israel…y triunfo absoluto en Turquía, en las filas del Besiktas. También ha jugado en otros países como Lituania o Ucrania.
Carmelo Anthony era la estrella de la Final Four a pesar de ser un freshman. En esta serie final acumuló 53 puntos y 24 rebotes y fue el jugador más destacado en la final contra la Kansas de Hinrich, Collison y Lanfford, celebrada nuevamente en New Orleans. Los 20 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias le valieron el Most Oustanding Player, pero no aseguraba el título. Michael Lee tuvo la oportunidad de forzar la prórroga, pero de repente aparecieron los largos brazos de Hakim Warrick para cargarse el suspense de un zarpazo (81-78). Warrick aguantaría un par de temporadas más en Cuse para ser elegido en el draft del 2005 por los Grizzlies. Actualmente juega en los Suns y también ha prestado sus servicios en Milwaukee y Chicago.
Dos temporadas después North Carolina confirmaba el porqué era considerdo el mejor equipo de la nación (Jawad Williams, Sean May, Raymond Felton, Rashad McCants, Marvin Williams). Sean May firmó una actuación memorable en el Edward Jones Dome de Saint Louis, totalizando 26 puntos (10/11 en tiros de campo), 10 rebotes y 2 asistencias. Los Fighting Illini de Deron Williams y Luther Head -y de los europeos James Augustine, Roger Powell, Jack Ingram y Dee Brown- plantaron cara y el partido no se resolvería hasta los instantes finales en los que Raymond Felton (17 puntos y 7 asistencias) resolvió con 3 tiros libres (75-70). Felton es ahora mismo uno de los mejores bases de la NBA tras un crecimiento a fuego lento mientras que Sean May, castigado por las lesiones, intenta renacer en Montegranaro (Lega).
Derrick Rose llegó a Memphis Tigers -entrenados por John Calipari– como el mejor jugador de high school y lo demostró en la segunda mitad de la final que les enfrentó a Kansas. A punto estuvo de convertirse en héroe de no haber sido por Mario Chalmers. No estuvo muy acertado en el tiro, pero con un triple forzó la prórroga en el Alamodome de S. Antonio dando alas a los Jayhawks, que ya no tuvieron problemas en el tiempo extra (75-68) Se quedó sin premio, Darrell Arthur, otro artífice del triunfo gracias a sus 20 puntos y 10 rebotes. Volviendo al gran protagonista de la noche, reseñar que no fue premiado con una primera ronda en el draft, siendo traspasado por su equipo (los T-Wolves) a Miami, donde juega desde el 2008. Esta temporada podría conseguir el doblete.
Para cerrar este compendio de historias con final feliz -al menos para los vencedores- acabaremos de una manera políticamente incorrecta. Lo haremos con el casi doble buzzer beater de Gordon Hayward, próximo protagonista de nuestra saga NBA Inside. Ocurrió en el Lucas Oil Stadium de Indianapolis, terreno de la universidad de Butler, cenicienta por dos temporadas consecutivas. Duke, el rival, poderoso de un gran Kylie Singler, a la postre mejor jugador de la final a punto estuvo de ser sorprendido por el empuje de Matt Howard y el propio Hayward (Como narramos en su momento, la carroza se tornó calabaza.