DEJAN TODOROVIC. Dejando al margen el excelso partido realizado, es una alegría para todos que de síntomas de estar más que recuperado de la grave lesión sufrida. El siguiente paso a dar es mostrar más regularidad y esperar si puede igualar y mejorar las capacidades que mostro en su último año en Bilbao.
GUIÓN PERFECTO. Victoria plácida, minutos para los jóvenes y descanso para los más castigados físicamente. ¿Qué más se puede pedir? Seguramente, que Daniel Clark no hubiese cometido 5 faltas tan pronto para darle minutos. Obviando esto, guión de partido deseado por todos.
Con todos esos condicionantes se echaba el balón al aire. La caldera que acostumbra a ser el pabellón andorrano hoy no era tal y lo notaban los jugadores entrando algo fríos a la cancha. Los visitantes no iban a desaprovechar la ocasión y en visto y no visto se iban a poner por delante (4-10, min.3). Poco a poco los locales fueron carburando con buenas acciones de Musli y de Massenat. Maccabi Rishon ya no veía el aro contrario con tanta facilidad excepto Bourdillon que mantenía el tipo para los suyos. Momentáneamente el luminoso fue volteado por los locales, pero Williams lo dejaba todo empatado tras los 10 primeros minutos (20-20, min.10).
Senglin steals, finishes and FLEXES for good measure! #7DAYSMagicMoment pic.twitter.com/jaog7TGpZF
— 7DAYS EuroCup (@EuroCup) December 11, 2019
El segundo cuarto comenzaba con un cambio de chip por los locales. Visto lo visto, sabían que si apretaban un poco el acelerador podían llevarse el partido sin excesivos sobresaltos. Musli comenzaba a imponerse en la pintura mientras que a los israelitas se les comenzaba a atisbar cierta anarquía en sus ataques (31-24, min.14). Daniel Clark cometía su 3ª falta personal en menos de 6 minutos y se tenía que sentar en la banqueta. Alex Hamilton volvía a acercar a los suyos con un buen 2+1, pero aquí llegó el punto de inflexión del partido (33-30, min.15). Sin hacer una excelsa defensa, Morabanc Andorra comenzó a provocar los fallos en el ataque visitante. Tampoco los locales eran un derroche de virtudes, pero 2 triples de Massenat ponían tierra de por medio (39-30, min.18). Los fallos visitantes se seguían acumulando: Bourdillon desde el perímetro, Kelly debajo del aro, Swing en penetración, etc. No había modo de sumar. Cada uno hacía la guerra por su cuenta y eso no ayudaba. Nadie mostraba carácter ni en defensa, cometiendo solo 2 faltas en el cuarto. Senglin olió sangre y anotaba 4 puntos seguidos. Llovet se unía a la fiesta y cerraba el cuarto con 15 puntos de ventaja para la escuadra local (45-30, min.20). 5 minutos sin anotar del conjunto visitante que dejaban el partido en bandeja de plata a los de Ibón Navarro.
El inicio del tercer cuarto iba a marcar si definitivamente el partido era historia o si Maccabi Rishon iba a dar guerra. Pronto se vio que los locales no querían sufrir de más. Sendos triples de Hannah y de Walker dejaban la misión en imposible para los hombres de Guy Goodes (51-32, min.21). 2 triples seguidos de Bourdillon daba algo de emoción al encuentro, pero entre Todorovic y Senglin sofocaban la posible rebelión (67-46, min.28). A partir de aquí, minutos para los jóvenes Alexis Bartolomé y Raimon Carrasco y ver hasta donde se iba a ir la diferencia, siendo el resultado final de 84-61.
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