Dura derrota de Unicaja ante el Bayern de Munich en su debut en casa en la Eurocup. El equipo malagueño no supo culminar el trabajo que había realizado en el primer tiempo, y se desinfló completamente en el segundo, donde dio muestras de una preocupante escasez de ideas ante la intensidad defensiva de los de Djordjevic, recurriendo sólo a los lanzamientos exteriores en un día de aciago acierto para su perímetro.

Comenzó bien el partido para los hombres de Joan Plaza, que se aprovechaban del dominio en la pintura de Dejan Musli para lograr sus primeras rentas. Kyle Fogg estaba muy activo sacando faltas y asistiendo a sus compañeros, mientras el Bayern Munich no era capaz de hilar dos ataques seguidos con coherencia, perdiendo infinidad de balones (8 en el primer cuarto) e incurriendo en faltas inocentes. Parecía que iba a ser un paseo para Unicaja, que al final del primer cuarto mandaba con solvencia (22-10). 

El segundo cuarto fue un cúmulo de errores por parte de ambos equipos. Unicaja era incapaz de anotar siquiera un triple de los siete que intentó en el cuarto (2/15 al descanso desde la línea de 6'75). El equipo bávaro recurría a Devin Booker para no perderle la cara al encuentro, y también comenzaba a aportar el exjugador del Valencia Basket Vladimir Lucic (6 puntos al descanso). Se llegaba al final del segundo cuarto con ventaja local (34-26) ante un gris Bayern Munich, fundamentalmente por la gran actuación de Dejan Musli (15 puntos y 19 de valoración al descanso).

Tras la reanudación, el conjunto alemán recortó la desventaja hasta colocarse a 2 puntos (34-32), momento en el que se inició el canto del cisne local. Un triple desde medio campo de Alberto Díaz (cuya intención era pasar el balón en el contraataque a su pívot, que estaba en la zona rival), más otro de Dani Díez, volvía a dar una relativamente cómoda ventaja (40-32) a los malagueños, pero se trataba de un espejismo, ya que el Bayern había subido varios grados su intensidad defensiva, y los jugadores de Unicaja no hallaban la forma de romper la defensa. De esta manera, los bávaros daban la vuelta al marcador (46-48) a un minuto del final del tercer cuarto. Todo estaba aún por decidir con un cuarto por jugarse (48-50).

Pero al Unicaja se le apagó la luz. Se quedó sin ideas en ataque ante la defensa del Bayern. Sin recursos, y como única solución, el lanzamiento triple, en un día para olvidar desde la línea exterior (6/34, un paupérrimo 17%). El parcial de inicio del Bayern fue concluyente (0-11) para agravar la ansiedad con la que los jugadores de Plaza buscaban recortar una diferencia que se iba incrementando merced a la actuación de Vladimir Lucic, muy cómodo anotando y asistiendo a sus compañeros. Casi seis minutos tardó Unicaja en anotar un punto en el último cuarto, conseguido por N'Diaye desde la línea de tiros libres. Para entonces (49-61), la sensación que transmitían los equipos eran completamente distintas: impotencia local frente a calma y gestión de la diferencia visitante.

Derrota en casa ante un hipotético rival directo (62-74), en un día para olvidar de Jamar Smith (-10 de valoración).