Repasamos un año de baloncesto desde la perspectiva personal de 12 hombres solobasket que destacan lo mejor de "su" 2011 baloncestísco
Cuánto lleva escalar hasta la cima, rápido caes si resbalas, por carlos jiménez
El pasado mes de diciembre, Juan Carlos Navarro necesitaba anotar 14 puntos para ser el máximo anotador de la historia de la Euroliga. Así superaría los 2.715 puntos de Marcus Brown. Faltaban 5:33 para el final del tercer cuarto, su equipo se batía en casa ante el Olimpija Liubliana y… lo hizo. Fue en un contraataque tras pase de Eidson.
Todo el mundo se acuerda de un éxito como el de ‘La bomba’ o el de las últimas canastas conseguidas por Dirk Nowizki para que los Dallas Mavericks consiguieran su primer campeonato en la NBA pero no de quién anotó la primera canasta cuando en 1980 la franquicia tejana dio su primer paso en su historia ¿Ustedes tampoco? Fue un tal Abdul Jeelani (Gary Cole), luego jugando en España e Italia. Jeelani, hasta hace nada, se recorría las calles de Wisconsin como vagabundo. Este año fue recatado para entrenar y dar charlas a chavales conflictivos de la periferia Roma. Otro ex NBA, Ray Williams, éste pasando por la NBA con mayor éxito, 15.5 puntos y 5.8 asistencias en 10 cursos, dejó de vivir en su coche gracias a Linda Crawford, una vieja amiga y enfermera con la que se casó el pasado mes de Agosto.
Sin final feliz tenemos la historia de José ‘Piculín’ Ortiz, un icono del baloncesto en Puerto Rico y viejo conocido en España por su paso por varios equipos de la liga ACB. Después de su retiro todo le fue cuesta arriba: fracasos políticos, malas inversiones o divorcio. El pasado mes de noviembre Ortiz tocó fondo ingresando en la cárcel, concretamente en el Centro de Detención Metropolitano de Guaynabo, por tenencia y cultivo de marihuana, allí recibe tratamiento para superar su problema de alcoholismo y drogas. El ex jugador está en bancarrota y podrían caerle 40 años de reclusión. Ojalá el año que viene podamos recoger su historia para bien.
Homenaje a Juan Carlos Navarro por JR Sanchís
El día que Nikola Mirotic se hizo hombre, por alberto rubio
El Europeo Sub’20 que se disputó este verano en Bilbao ha supuesto la consagración de Nikola Mirotic como jugador grande de baloncesto. En un torneo que suele ser escaparate de los jugadores que dominarán el baloncesto en los próximos años, se pudo disfrutar de la calidad en el tiro de Sandro Gentile, de la inteligencia de Nicolo Melli, la clase y elegancia de Evan Fournier o la fuerza en el rebote de Furkan Aldemir, pero la exhibición mostrada por el montenegrino nacionalizado español no ha tenido parangón. Bien arropado por una buena selección de jugadores dirigidos por Juan Antonio Orenga, el ala-pívot se hizo el dueño del parquet de Miribilla e impuso su ley en todos los encuentros.
Fue nominado MVP del torneo y nadie le pudo poner ningún pero a la elección. 27 puntos y 10 rebotes de media, fue la gran estrella del torneo y pasando por encima de todos los que le intentaron marcar, siendo el principal arma de la Selección Española para hacerse con la medalla de Oro. Impresionantes sus exhibiciones ante Ucrania (41 puntos, 14 rebotes y 57 de valoración) y en semifinales ante Rusia, mantuvo su línea en la final con 29 puntos y 11 rebotes para superar a una Italia muy correosoa. Su gran participación en el Sub’20 le ha dado otro paso más en su cecrimiento como jugador y ha servido como acicate para que su nuevo técnico en el Real Madrid, Pablo Laso, le haya dado los minutos y confianza que se merece, hechos que ha sabido aprovechar Mirotic para seguir haciéndose importante en su equipo como confirmó este Diciembre siendo el MVP del mes en la Euroliga.
El segundo oro de España en el Eurobasket de Lituania, por mario gómez
Un hecho histórico y que confirma a este grupo de jugadores entrenados por Sergio Scariolo como la mejor generación que el baloncesto español ha tenido en toda su historia, teniendo en su haber un Mundial y un sin fin de medallas cosechadas en la última década, sumado al reconocimiento internacional de unos deportistas que han marcado un antes y un después en el mundo del baloncesto contemporáneo. Gente como Juan Carlos Navarro, Pau Gasol o Felipe Reyes son la herencia de unos "Juniors de Oro" que se convirtieron en los "Golden Boys de Saitama", hasta tuvieron tiempo de tutear a los Estados Unidos con la medalla de plata obtenida en aquella inolvidable final en los Juegos Olímpicos de Pekín.
No fue sencillo el camino para repetir una hazaña más, después de un dubitativo debut ante Polonia , pero la contundente victoria ante los anfitriones fue empañada por la derrota ante Turquía y la ausencia de un Pau Gasol que fue de menos a más en el campeonato, sumado a la garra de su hermano Marc y la clase de Calderón en la dirección hacían de España una clara favorita al triunfo final. En la segunda fase equipos como la Alemania de Nowitzki o la Serbia de Teodosic tuvieron que claudicar, así como Francia en un polémico partido, donde a los galos les interesaba más perder que ganar. En cuartos Eslovenia aguantó los dos primeros cuartos, en semifinales una cenicienta llamada Macedonia puso las cosas muy difíciles y en la final los 12 jugadores sacaron lo mejor de sí para alegría de una afición que está acostumbrada al mejor caviar, pero ha de ser consciente de que el ciclo está llegando a su fin, con el Mundobasket de España en el 2014 como colofón final. Mientras tanto, que siga la fiesta y disfrutemos de una generación única e irrepetible.
Cuando las cenicientas acaban siendo las reinas del baile, por Gerard Solé
En cualquier competición de cualquier deporte, no hay nada mejor para el aficionado en general al mismo que la sorpresa mayúscula, la victoria más inesperada. En la NCAA, ocurrió… y además dos veces, la segunda aún de forma más impredecible. Un joven entrenador llamado Brad Stevens hizo que la pequeña universidad de Butler, situada en el estado de Indiana, una de las muchas cunas del baloncesto americano, hiciera historia… y por dos veces. Tras ocho participaciones fugaces en el gran baile del March Madness, Stevens hizo lo imposible y colocó a Butler ya no entre los mejores del país sino, incluso, en la gran final del campeonato. Visto ahora desde el exterior y sin estar en el momento, es evidente que en el año 2009, Butler iba a ser un rival complicado para muchas de las grandes, con un talento sensacional en el nombre de Gordon Hayward.
[[{“type”:”media”,”view_mode”:”media_large”,”fid”:”10214″,”attributes”:{“alt”:””,”title”:””,”class”:”media-image”,”typeof”:”foaf:Image”,”wysiwyg”:1}}]]Sin embargo, uno no puede dejar de admirar y seguir sorprendido por la actuación de los Bulldogs en la temporada 2009, en la que, para llegar a la gran final en la que el mismo Gordon Hayward tuvo el tiro ganador (eso sí, desde media pista) ante toda una clásica e histórica Duke, el conjunto de Stevens tuvo que superar a otros históricos como Syracuse, Kansas State o Michigan State (este último, ya en la final). Parecía evidente que, con la sorprendente actuación de Butler, su gran estrella sería carne de NBA y aquí terminaría toda el cuento de hadas de esta pequeña universidad de Indiana. Pero la vida da muchas vueltas… y la fortuna volvió a sonreír a los de Stevens. Con más trabajo que nunca, Brad acabó formando una plantilla muy competitiva sobre dos piezas ya fundamentales en el anterior éxito, el escolta Shelvin Mack y el interior Matt Howard. Y con estos dos puntales, volvió a hacer realidad su fantasía, llegando, tras varios finales de infarto (intenten ver los minutos finales contra Old Dominion y Pittsburgh), a un nuevo final feliz, una nueva final de la NCAA. Lo que ocurrió a partir de ahí, con Kemba Walker predestinado a hacer a los Huskies de Connecticut, poco importó.
El reinado de Perfumerías Avenida, por daniel marzo
Hablar de 2011 es hablar de Perfumerías Avenida en lo que a baloncesto femenino se refiere. El equipo salmantino logró realizar una temporada casi perfecta, sumando Supercopa, Liga y la ansiada Euroliga, sumando además nada menos que treinta y ocho victorias consecutivas. Pero 2011 también fue el año de Rivas Ecópolis, el conjunto madrileño logró alzarse con el único título que no viajó hacia tierras salmantinas, la Copa de la Reina, bajo el liderazgo de grandes veteranas como Valdemoro o Aguilar, clásicos tanto de la liga como de la selección. Precisamente la selección absoluta femenina puso el punto negativo para un verano increíble del baloncesto nacional, el conjunto dirigido por José Ignacio Hernández viajaba a Polonia con la idea de luchar por lo máximo y se volvió con una decepción notable que a buen seguro ayudará a reflexionar de cara al futuro. Un futuro asegurado para la selección española como demostraron las selecciones inferiores del baloncesto femenino, que lograban medalla en los Europeos U16 (Oro), U18 (Bronce) y U20 (Oro), así como en el Mundial U19 (Plata).
Y si esto sucedía en Europa, al otro lado del Atlántico nacía una estrella, su nombre: Maya Moore. Con apenas 22 años, la de Jefferson, Missouri se ha consolidado durante este año como la gran estrella emergente del baloncesto femenino y no tardarán en escucharse las voces que la bautizan como la nueva ‘Jordan femenina’. Lo cierto es que motivos no faltan, a parte de un juego explosivo y espectacular, su currículo lo dice todo. Después de ser número 1 del Draft y tras lograr dos títulos consecutivos de la NCAA con la Universidad de Connecticut, en su primera temporada en la WNBA ha logrado jugar el All-Star, ser Rookie del Año y sobretodo, lograr el título de liga con Minnesota Lynx. Apunten su nombre, porque será uno de los más importantes de 2012 en el deporte de la canasta y a partir de Enero, se podrá disfrutar en Euroliga con la camiseta de Ros Casares.
el regreso de garbo y la canasta imposible de Mcintyre, por sebastián souvirón
Para mí, uno de los momentos inolvidables del año 2011, tuvo lugar el 19 de marzo, día de San José. En el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena se enfrentaban Unicaja y Real Madrid en el partido de la vigesimosexta jornada de la liga ACB. El octavo de la tabla recibía al segundo clasificado, y el premonitorio ambiente que se respiraba en el pabellón malagueño era de satisfacción y euforia. En una temporada en la que la afición de Unicaja había tocado fondo anímicamente, tras la profunda decepción que supuso no clasificarse por segundo año consecutivo para la Copa del Rey, con una grave fractura entre los seguidores y el equipo. Chus Mateo había sido el elegido para hacerse con las riendas del equipo después del fracaso de García Reneses, que había acabado su estancia en Málaga con un ignominioso tiempo muerto. Pero el ánimo de los aficionados de Unicaja cambió con el fichaje de su jugador talismán, del hombre que simbolizaba los dos títulos nacionales cosechados por el club. Aquél que se había marchado en la cumbre de su carrera para jugar en la NBA, en los Toronto Raptors de su amigo Jose Calderón. Aquel día de San José, y frente al equipo que lo trajo de vuelta a España desde Rusia, Jorge Garbajosa volvía a vestirse con la camiseta número 15 del Unicaja, gracias a la amable cesión de Sinanovic, que había llevado ese número desde que el nuevo técnico lo subiera desde el equipo vinculado. En aquella crónica, quien redacta estas líneas, se permitió la licencia literaria de hablar de nostoi (nόστοι), el poema épico de la Grecia Arcaica que hablaba del retorno a casa de los héroes griegos que participaron en la Guerra de Troya. Todo ello, junto con un vídeo sobre la llegada de Jorge a Málaga proyectado en los prolegómenos del partido, dotó de emoción a un partido que fue soberanamente malo hasta los instantes finales de la prórroga.
El resto de lo que pasó es sobradamente conocido, pues ha entrado con letras mayúsculas en la Historia de la ACB. A poco más de medio minuto para el final de la prórroga, y tras haber recibido un tapón de Garbajosa en una ayuda defensiva, Pablo Prigioni clavaba un enorme triple de 8 metros que ponía al Real Madrid con 2 puntos de ventaja (63-65). A falta de 26 segundos, Garbajosa respondía con su único triple de la noche, y volvía a darle la vuelta al marcador (66-65). Prigioni dormía la bola hasta que, a falta de 4 segundos, clavaba un nuevo triple que parecía definitivo (66-68) ante la mirada atónita de los espectadores. Pero, de nuevo Garbajosa, demostraba ser uno de los más inteligentes en la pista, y sacaba rápidamente para encontrar a Terrell McIntyre, quien, en un escorzo imposible, rectificaba su lanzamiento en el aire para evitar el intento de tapón de dos jugadores madridistas, y enchufaba un triple desde ocho metros que daba la victoria a Unicaja (69-68) en una noche mágica. La desgarrada voz de Oscar Cuesta y su "¡¡Dime que no estoy soñando!!" daría la vuelta al mundo y quedaría íntimamente unida para siempre a este momento imborrable de la memoria de los que asistimos al partido aquella noche de marzo de 2011.
bilbao basket toca el cielo y nace el "efecto miribilla", por igor minteguia
Este año va a ser inolvidable para el entorno de Bilbao Basket. El club vasco ha escrito durante 2011 las páginas más brillantes de su corta historia. En estos 12 meses, los de Arrinda han conseguido objetivos impensables hace ahora un año, pasando de los sueños a la realidad en un abrir y cerrar de ojos. Da vértigo echar un pequeño vistazo al carrusel de emociones y alegrías vividas por los seguidores del club vizcaíno durante esta etapa:
Tras una fase regular ACB con altibajos, un rush final excepcional les permitió clasificarse en 6º posición. Ya en la post-temporada, sucumbiría ante el nacimiento del ya conocido "Efecto Miribilla", término acuñado por el escolta ibicenco Paco Vázquez. Tras vencer en el 2º encuentro disputado en la Caja Mágica, Bizkaia Bilbao Basket lograría amarrar los dos partidos en casa para reinscribir la historia y clasificarse para la final de la Liga ACB, donde se toparían con un FC Barcelona que no tendría piedad de los bilbaínos.
Gracias al magnífico playoff por el título firmado, Bilbao Basket (ahora Gescrap Bizkaia) logró para esta temporada una licencia para la Euroliga por primera en su historia. Y su estreno no ha podido ir mejor. Tras estar durante semanas en la cuerda floja, su meritoria victoria en Estambul ante Fenerbahce y Se ponía así broche de oro a 365 días de ensueño para Bilbao Basket. Con un proyecto consolidada en lo deportivo, económico, institucional y social, ahora a Gescrap Bizkaia le queda el difícil reto de mantenerse en la elite. Mimbres tiene para ello.
la senda de cajasol hacia treviso y la lucha por la eurocup, por borja de diego
La primera y gran temporada de Joan Plaza en Sevilla (6º puesto) se materializó con un billete para la Eurocup. Tras casi una década de travesía por el desierto, entre proyectos que no terminaban de funcionar y un breve paso por la Eurochallenge, por fin se cumplía el sueño de jugar en Europa. Con la veteranía de Bullock y un Paul Davis en el que ya empezaba a despertar la vocación de gigante arrancó la travesía de este “Cajasol Sevilla”: los problemas para superar la primera fase que resolvió un épico Txemi Urtasun liderando el asalto a Jerusalén, un desfile brillante por el Top16 con duelos ante equipos históricos como el Alba de Berlín y la Benetton, y la noche histórica de San Pablo para imponerse al Budivelnik en cuartos de final, pequeños pasos mientras caían Estudiantes y Gran Canaria 2014, pero con el que los andaluces llegaron a la soñada Eurocup Finals.
En Treviso y ante la anfitriona Benetton, Cajasol conquistó tierra italiana y siguió escribiendo historia para alcanzar el sueño: su primera final europea. Aquí se encontraron con un Unics Kazan que había demostrado su poderío durante toda la competición, pero los sevillanos (incluido Calloway, lesionado entonces) sobrevivieron a un primer parcial demoledor (16-4) para ofrecer una viva lucha por el título. Meterse en el partido no fue suficiente ante la sangría ofensiva de Popovic (MVP de la final) y un Lampe castigador, y Cajasol terminó derrotado, pero con un nuevo subcampeonato para escribir una de las páginas más hermosas de su historia.
obradovic y diamantidis se coronan en la euroliga, por fernando gordo
Si ha habido dos protagonistas este año en el baloncesto europeo han sido Zeljko Obradovic y Dimitrios Diamantidis. Juntos lograron romper todos los pronósticos en la Euroleague al eliminar en cuartos de final a un Regal Barça con factor pista y posteriormente se proclamaron campeones de la Final Four de Barcelona tras derrotar a Siena primero y Maccabi después. El entrenador serbio consiguió así su octavo entorchado europeo y el cuarto con el Panathinaikos y su planteamiento defensivo contra los azulgranas fue reconocido por todo el continente como el verdadero motivo por el que los griegos lograron clasificarse. La defensa a Navarro flotando a Sada y a Ricky en el lanzamiento de tres minó la moral de los blaugranas partido a partido en la serie. En la final a cuatro Obradovic volvió a ganar el duelo de banquillos a Pianigiani y David Blatt y acrecienta así su leyenda como el entrenador europeo más laureado de la historia.
Por su parte Diamantidis logró los dos premios individuales más importantes a los que se puede optar en la Euroleague. El de MVP de la fase regular (12.6 puntos y 6 asistencias por partido) y el de MVP de la Final Four con 16 puntos, 5 rebotes y 9 asistencias contra el Maccabi de Tel Aviv. Por si fuera poco también se proclamó por sexta ocasión como mejor defensor de la competición. Sus actuaciones fueron decisivas en el tramo final de la competición europea dando toda una lección de cómo se juega el bloqueo directo y logrando canastas importantes cuando su equipo más lo necesitaba. Dos años después Europa se teñía de nuevo de verde y la ciudad de Barcelona veía como los griegos se llevaban una competición en la que el Real Madrid de Molín decepcionó en su fase final y en la que Regal Barça no pudo ni siquiera clasificarse para ella. Navarro y San Emeterio fueron incluidos en el mejor quinteto de la competición junto al propio Diamantidis, Schortsanitis y Mike Batiste.
lucentum alicante, del infierno al paraíso en pocos meses, por ramón juan
El año 2011 ha sido una montaña rusa para el Lucentum Alicante. Acababa la temporada 2010-11 consiguiendo una sufrida salvación tras una temporada marcada por los contratiempos en forma de lesiones, malos resultados y, sobretodo, marcada por una delicada situación económica que dejaba al club alicantino al borde de la desaparición allá por el mes de junio. Un futuro incierto en el horizonte para el equipo alicantino.
Apenas seis meses después hablamos del equipo revelación de la Liga Endesa y del único equipo de la zona baja que apostó en verano por aprovechar las oportunidades que brindaba el lockout haciéndose con los servicios de Kyle Singler, un jugador que ha sido todo un fenómeno en la liga y que ha dejado huella en Alicante. Apuesta arriesgada que salió bien. Tras la marcha de Singler el equipo sigue demostrando un carácter y una dinámica ganadora y sigue invicto tras la marcha de su estrella, gracias en gran medida a la labor de Txus Vidorreta en el banquillo y la espectacular campaña de Kaloyan Ivanov, que ya acumula tres MVP de la jornada en lo que va de liga.
De estar en el pozo a acariciar con las manos la clasificación para la Copa del Rey. De una paupérrima salvación con 9 victorias a tener esas victorias en apenas un tercio de liga. Del pozo a las nubes en apenas unos meses. El Lucentum despertó de su pesadilla y ahora vive su sueño más dulce.
la nba salda su cuenta con nowitzki, por alejandro velilla
Cuenta la leyenda, que en un rincón del Hall of Fame, habitan varios mitos del baloncesto NBA: MVP’s, con más de 10 presencias en el all-star, con récords de asistencias, puntos o rebotes, que tienen algo en común: Nunca ganaron un anillo. Hacia ese inevitable y cruel destino, donde se encuentran los Barkley, Malone, Stockton o Maravich entre otros, se encaminaban varios de los jugadores de los Dallas Mavericks, en especial dos de ellos. Desafiando a la edad, al big three, a los bicampeones y todas las adversidades habidas y por haber, Dirk Nowitzki y Jason Kidd ganaron este 2011 su primer anillo, el primero a punto de cumplir los 33 años y el segundo habiendo alcanzado ya los 38.
Los Dallas Mavericks y Dirk Nowitzki consiguieron el tan ansiado anillo contra todo pronóstico, se colaron entre los primeros de la regular, los Bulls, el poderoso big three de Miami y, los siempre favoritos, Lakers, Celtics o Spurs. Nadie daba un duro por ellos, de hecho, en la porra de expertos de solobasket, nadie los metió ni en la final de conferencia, pero nadie contaba con el enorme corazón de estos Mavs, que barrieron a los Lakers, superaron con problemas a los Thunder y llegaron al escollo final. Ahí esperaban los Heat, en su imbatible Airlines Arena y con su joven equipo de talentos, liderados por LeBron James y Dwyane Wade. Pero, como bien es sabido, Dallas humanizó a Miami, rompió la imbatibilidad de su cancha y se proclamó campeón en Miami, sobrándole incluso un partido. Nadie en Dallas olvidará este 2011, pero, especialmente, un gigante teutón de 33 años, que recibirá el 2012 con un anillo de campeón y un MVP de las finales.
la explosión de tres cracks en ciernes, por jon de la presa
El complejo anexo del Palau Sant Jordi fue testigo en mayo de la confirmación de un héroe para el futuro, Dario Saric y de sus dos secuaces altamente calificados, Mario Hezonja y Dominik Mavra. Como una cuadrilla de amigos, el KK Zagreb con estos tres jugadores en pista fueron aniquilando uno tras otro a todos sus rivales en el Nike International Junior Tournament. INSEP, FMP, Fenerbahçe y Zalgiris fueron sus victimas, con sus puntos álgidos en los partidos ante el cuadro turco y el lituano.
Saric destapó el tarro de las esencias, dominando el juego en todos sus ángulos y finalizando el torneo con una asistencia imposible con la que llegaba al triple doble. Dominador, abusador, haciendo de todo incluso con el labio roto. El juego de Zagreb giraba en torno a sus estrellas y su lucimiento personal, si bien, fue tremendamente efectivo y atractivo, del equipo más joven del torneo. Hezonja era el otro puntal junto con Mavra. Un año más pequeño, Hezonja lució su extraordinario talento técnico y atlético, mientras que Mavra se lucía sobre todo gracias a su extrema habilidad para crearse y anotar sus tiros de media y larga distancia.
La dominación de estas tres estrellas en ciernes hizo que en estos cuatro partidos promediaran números estratosféricos. Dario Saric firmó 20.3 puntos, 12.3 rebotes, 6.3 asistencias para 29. 3 de valoración. Hezonja, el más joven de los tres acabó con 21 puntos, 7.8 rebotes, 1.1 asistencias y 22.1 de valoración, mientras que Mavra hizo 21.3 puntos, 7.5 rebotes, 3.3 asistencias y 27.8 de valoración.