Pete Mickael debutó con fuerza en el Palacio, anotó los tres primeros puntos y lideró la anotación en el primer cuarto de los locales junto con César Lima. No se había llegado a los cuatro minutos de juego cuando a Scott Wood le señalaban su tercera falta personal.

Los visitantes se mantenían en la brecha con una anotación coral. A falta de tres minutos para la finalización del primer asalto un triple de Rafa Freire situaba a los gallegos por delante en el electrónico 9-13 y Pete Mickael respondía. Todo parecía apuntar a que se iba a ver un partido igualado y emocionante, 16-17 al final del cuarto.

Pero en la reanudación llegó la empanada murciana. Sólo Kim Tillie al principio y al final del cuarto logró encestar en juego. La zona universitaria se convirtió en el patio de recreo de Mike Muscala que lideró el despegue de Obradoiro hata el 19-31 a falta de 1:54. Mario Delas con un 2+0 del que consiguió anotar tras el rebote ofensivo ponía de manifiesto la superioridad visitante en la zona, elevando el marcador a las máxima de partido hasta el momento 19-31. Tillie y Pavel Pumprla cerraron el cuarto 21-37.

Se esperaba la reacción local pero una jugada de 7 puntos con canasta y tiros libres de Pumprla rematada con un triple de Alberto Corbacho dio la puntilla al UCAM que cayó en una espiral de cúmulo de despropósitos ya no solo en el tiro sino en el pase y el manejo de balón. Muscala se gustaba con un alley-oop para finiquitar el cuarto 30-59.

Con todo el pescado vendido Durand Scott quiso dejar constancia de su paso por el partido y realizó un inicio de cuarto para enmarcar facilitado por la pasiva defensa del equipo murciano que sólo quería que el partido acabara cuanto antes. La quinta canasta consecutiva de Scott puso el 33-72 en el marcador máxima ventaja del partido (+39) pasado ya el ecuador del cuarto.

Los minutos finales ya sólo sirvieron para escuchar las demandas de la afición que cargó contra casi todos, en una respuesta entendible ante una paliza que habrá que buscar en la hemeroteca para encontrarle resultado similar, en casa y con un equipo de “su liga”. Al final 47-83.