La derrota en Eurocup ante el Telenet Ostend hizo esperar acontecimientos, movimientos precipitados para reorientar la situación del Baloncesto Sevilla. Si bien todas las miradas se dirigieron hacia Scott Roth, que huiría hacia delante con unas declaraciones sin atender preguntas en rueda de prensa, desde el cuerpo directivo se han concentrado en otra figura permanente en el banquillo: Dane Watts. El ala-pívot sin minutos tras comprobarse que no tiene nivel suficiente para la Liga Endesa, ha sido el primer corte tras alcanzar un acuerdo para rescindir el contrato que unía a ambas partes.

Casi una hora antes, Juan de la Huerga adelantaba desde el Diario de Sevilla su fichaje por el Limburg United. El club sevillano no ha aclarado en su nota de prensa nada más allá de la rescisión consensuada entre jugador y directiva, además de agradecer su trabajo realizado durante sus meses en Sevilla y desearle lo mejor en su trayectoria deportiva. Esto deja en el aire algunas preguntas que despertó la llegada de Watts, que se suman a la gestión de Jefferson Capital Funding, y nadie ha aclarado desde el cuerpo técnico ni el directivo: ¿qué motivó, más allá de su relación con Jeffrey Meythaler, el fichaje del estadounidense? ¿por qué no cuadra el año de contrato que anunciaba la nota de prensa con los tres que destapó Diario de Sevilla? Y sobre todo, ¿cómo repercute económicamente el corte sin haber dejado clara esta vinculación contractual?