El Caja San Fernando ha cerrado el primer fichaje para la temporada 2005-06 al alcanzar un acuerdo con Branimir Longin para la próxima temporada con opción a una segunda. El alero croata, de 27 años, 93 kilos y 1,97 de estatura, procede de la Cibona de Zagreb y ha sido incluido en el All Star y en el quinteto ideal de la liga de su país en el pasado ejercicio, en el que también ha evidenciado unos buenos números tanto en la Euroliga (10 puntos, 3.5 rebotes y 10 de valoración de media en 16 partidos disputados) como en la Liga Adriática (10.7 puntos, 2.9 rebotes y 10 de valoración media en 28 encuentros). Longin presenta también un envidiable palmarés, por cuanto con la selección croata se colgó la medalla de oro en el Campeonato de Europa júnior del 96 y, ya como profesional, se ha proclamado campeón de la Liga croata en las temporadas 2000-01 y 2001-02 con la Cibona, así como cuatro veces campeón de Copa en los años 1998 y 2003 (Zadar), y 2001 y 2002 (Cibona); también se adjudicó el título en la Liga Adriática con el Zadar en la temporada 2002-03.
Con el talento implícito a cualquier jugador proveniente de la prolífica cantera balcánica, Longin es un escolta con buen físico que también puede ejercer de tres aunque ése no sea su puesto natural. En cualquier caso, la estructura que en la actualidad tiene la plantilla del Caja San Fernando ha determinado la decisión, ya que la pasada campaña con Andy Panko se demostró que un tres puro puede solapar su juego con el de Lou Roe, auténtica referencia del juego ofensivo cajista y en definitiva un ala-pívot con tendencia a salir de la zona para iniciar sus acciones. El equipo técnico del club sevillano ha tenido claro en todo momento que cualquier refuerzo para el perímetro debía ser compatible tanto con Roe como con Donatas Slanina, el otro pilar principal en la vertiente ofensiva. De hecho, el estilo de juego de Longin puede facilitar en gran medida la mejora en las prestaciones de sus dos compañeros. El croata muestra una considerable intensidad en defensa y además cuenta con un buen tiro y recursos técnicos cuyo valor se multiplica precisamente por la capacidad que tiene para asumir responsabilidades cuando las necesidades del juego así lo imponen. Su entrega y derroche de esfuerzo en cada partido constituyen además dos valores fundamentales para la elección, puesto que su perfil encaja a la perfección con la filosofía de implicación y compromiso que el Caja San Fernando busca imponer para la temporada venidera.