Herbalife Gran Canaria comunicó ayer la rescisión del contrato de Cory Jefferson. Se trata de una salida anunciada desde que Pedro Martínez declaró que no contaba con el americano dado el gran número de jugadores con los que cuenta en plantilla, especialmente interiores.

Jefferson fue fichado el 22 de febrero, por lo que ha pertenecido a la plantilla de Herbalife mes y medio. Anteriormente Josh Maggete estuvo tres meses, ya que fue contratado el 24 de diciembre y se hizo efectivo el final de su contrato temporal el 26 de marzo. Las dos rescisiones entran dentro de la lógica, ya que en el caso del base su fichaje era temporal por las lesiones de otros jugadores y al pívot le ha afectado el cambio de entrenador producido a posteriori de su contratación. Pero estos dos movimientos se suman al hecho de que Gran Canaria lleva ya tres entrenadores este año, a la marcha de Chris Evans, uno de los fichajes estrella del verano, y a la contratación de Siim-Sander Vene, pagando rescisión a Montakit Fuenlabrada cuando podía haber sido fichado gratis unas semanas antes. No cabe duda que la temporada, que debería haber sido la del disfrute del premio de disputar la Euroliga, es la más convulsa de los últimos tiempos del equipo pío pío.

Pero la rescisión del contrato de Jefferson también es una muestra de que Pedro Martínez ha cogido por completo las riendas del equipo y se demuestra no solo con la mejora en el juego y la consecución de victorias, sino con la racionalización de una plantilla que parecía descompensada como analizábamos cuando se produjo el fichaje: “En el comunicado de prensa el club canario habla de reforzar el juego interior ante las lesiones de Anzejs Pasecniks y Luke Fisher, pero estos dos fichajes hacen pensar en que podría haber alguna salida ante una zona superpoblada con los cuatro ya mencionados más Eulis Báez, Ondrej Balvin, Kim Tillie y Siim-Sander Vene, que viene jugando de tres su posición ha sido la de cuatro durante toda su carrera.”