El Real Madrid sabía de la importancia del partido, el club entero estuvo representado a tdos los niveles: Florentino Pérez, Cristiano Ronaldo, Jorge Valdano, Emilio Butragueño… era un día importante para el club, después de 15 años podían volver a la Final Four.

El Power Electronics Valencia estuvo representado de manera notable en la grada, con 400 aficionados. Una marea taronja desplazó un sentimiento al centro de la península: "Sí que podem".

Power Electronics consiguió la primera ventaja, aprocechando un inicio de partido algo trabado en el que el Real Madrid no encontraba un camino más fluido que el del pase a su pívot, Ante Tomic. Dusko Savanovic sí que hacía daño, anotando 9 de los 11 primeros puntos de su equipo y poniendo un 2-11 en el marcardor que añadía más presión -si cabe- a los jugadores del equipo blanco.

Tras un tiempo muerto, el Real Madrid incrementó su intensidad defensiva y provocó un atasco en el ataque valenciano, que recurrió a la calidad de De Colo -más revolucionado de lo normal, falló un tiro libre a pesar de acumular un 96% de acierto en la competición- para poder seguir sumando y llegar con ventaja al final del primer cuarto: 11-17.

Los segundos diez minutos brindaron al público madridista la reaparición de la garra de Felipe Reyes y los tiros de larga distancia de Tucker permitieron al Real Madrid compensar su falta de claridad en ataque e insinuar una remontada que hombres como Richardson -tremendo tapón a Suárez– y Savanovic -respondiendo con canastas a los puntos blancos- se encargaron de controlar hasta la reanudación, cuando un triple de Suárez dio al Real Madrid su primera ventaja.

Comenzaba entonces un partido nuevo, con un Real Madrid que se puso cuatro arriba gracias a un triple de Llull y que provocaba tiros forzados consiguiendo apurar las posesiones valencianas. Aunque el Power Electronics no se iba del partido, el Real Madrid consiguió estirar su ventaja algo más, hasta llegar al 58-51 previo al último cuarto.

El inicio del período final no fue bueno para el Power Eectronicsl Valencia, que vio como un mate de Fischer incrementaba la ventaja hasta los 9 puntos, pero el Real Madrid desaprovechó varias oportunidades de superar la barrera psicológica de la decena de puntos de ventaja y Rafa Martínez quiso cambiar la dinámica con un buen triple y un contraataque que no subió al marcador a pesar del tapón dudoso de D’Or Fischer.

La tensión provocó que el ritmo de anotación se redujera, con muchos tiros fallados. Esta situación que convenía al Real Madrid debido a su superioridad habitual en el rebote ofensivo, pero las distancias no eran muy amplias y otro triple de Rafa Martínez apretó el partido.

Sergio Llull acabó fuera de combate, pero un nuevo ataque convertido por el Real MadridAnte Tomic, tras dos rebotes ofensivos del equipo de Molin– y una bandeja fallada por un Nando de Colo al que se veía atenazado terminaron de decantar el partido del lado blanco.

Quince años después, el Real Madrid está en la Final Four de la Euroliga. Espera el Maccabi, y si ganan, Panathinaikos o Mens Sana.