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Fue una cuestión de ritmo. El Real Madrid espantó con el nuevo año la crisis de resultados que le había llevado a perder los cuatro últimos partidos disputados en la ACB, consiguiendo el control del marcador a partir de la segunda parte, cuando consiguió sacar el partido del ritmo cansino al que lo estaba sometiendo el Fuenla. 

La primera parte fue de baja anotación, buena para los intereses del renovado Ayuda en Acción Fuenlabrada, que contaba con Batista y Fitch como principales referencias.

Berzins no supo aprovechar una de las oportunidades de su vida, ya que tras estar defenestrado y no ser convocado durante varios choques, la llegada de Salva Maldonado al banquillo naranja lo puso de nuevo en la lista de 11. Además, las molestias de tobillo que sufría Batista lo llevaron a la titularidad. Pero nada de eso fue suficiente, Cinco minutos iniciales con tres faltas personales provocaron que el uruguayo tuviera que sustituirlo, forzando su estado físico (de hecho acabó lesionado en la rodilla). Después el letón no consiguió entrar en el partido, y el equipo visitante acabó jugando con Mainoldi y Tskitishvili como hombres interiores.

Más complicado lo tiene Antelo, que ni siquiera dispuso de minutos, como vienen sucediendo en los últimos choques del Fuenlabrada.

El nuevo jugo del Fuenla no difiere mucho del que ya venía practicando con Chus Mateo. Sin Burstein, la mayoría de la posesión la absorbe un Gerald Fitch que acabó fundido, ejerciendo en varias partes del partido hasta de hombre que sube la pelota. Por dentro el rey sigue siendo Batista, con o sin tobillo, con o sin rodill, hasta con ambos lesionados acabó jugando minutos en contra de la opinión de los médicos pero movido por su compromiso y ganas de ayudar.

El Real, por su parte, sigue notando la ausencia de un Sergio Llull que al menos ya pudo calentar con sus compañeros. En el interior se echa mucho de menos a Reyes por su poderío reboteador y anotador, a Van den Spiegel por los minutos de calidad refrescante que ofrece cuando sale desde el banquillo y con el corazón a Hervelle, el hombre más ovacionado en la presentación de los jugadores.

<f>Pero el fichaje de Marco Jaric ha hecho mucho bien. Alero titular, base suplente.. el serbio supo poner el ritmo del partido, tirar cuando tenía que tirar, penetrar cuando tenía que penetrar y ver al compañero mejor situado en cada jugada. Sus más de dos metros le permiten proteger la pelota ante cualquier base rival y no sufrir para defender a los treses rivales.

Bullock, Prigioni y Velickovic fueron los acompañantes de lujo de Jaric en una buena segunda parte blanca en la que anotaron 54 puntos mientras veían como al Fuenlabrada se le agotaban los recursos ofensivos hasta que Fitch cayó lesionado y se apagó la luz. Al final, victoria madridista por 88 a 72.