Los grandes conjuntos Euroliga peinan el mercado de jugadores desde edades bien tempranas. A nivel económico, las apuestas en formación suelen ser mucho más rentabilizables que cuando ya han echado la puerta abajo. El Real Madrid Baloncesto, por ejemplo, tiene en su estructura estrellas internacionales precoces como Fabian Kayser, Toni Garma o Egor Amosov. Sin duda, el nombre del día habla bien del hacer madridista en ese sentido.
La estrella del Real Madrid Baloncesto en el Torneo L’Hospitalet
La espectacular final firmada por Andrea Bjelic no dejó indiferente a nadie. Sin embargo, durante el torneo, hubo un jugador que brilló incluso por encima de un roster plagado de talento. El MVP del Real Madrid Baloncesto en el Torneo L’Hospitalet fue el alero ruso Egor Amosov. Un jugador, cuya historia reciente tiene particularidades respecto a otras del conjunto.
No es fácil sorprender a unas secretarías técnicas que controlan el mercado desde edades minibasket como son las de los equipos europeos. Sin embargo, el fichaje este verano de Egor Amosov fue un movimiento ciertamente tardío para lo que suele ser habitual. Este jugador del 2008 aterrizó en la capital en su segundo año de junior y, además, de un país cuyo contexto baloncestístico actual no es sencillo. A día de hoy, viene de promediar 16.5PIR, 17.5 puntos, 3 rebotes, 3.4 asistencias y 3.4 recuperaciones en los 5 partidos del Torneo L’Hospitalet, además de venir brillando en Liga U22.
¿Cómo se descubrió a este talento?
Egor Amosov llegó a segundo año de junior inmerso en el entramado formativo de un conjunto de la VTB que tampoco es especialmente conocido, BC Samara. En un país en el que clubes como Zenit o CSKA manejan el mercado nacional, Egor Amosov se escapó a las más que seguras tentativas de ambos, pero no para el Real Madrid Baloncesto. No es de extrañar que los blancos le pusieran el ojo, porque fue todo un fenómeno en Rusia.
Egor Amosov, antes de su llegada a la cantera del Real Madrid Baloncesto, ya había disputado 40 partidos en categoría senior. Además, no en cualquier división, sino en VTB. Allí se midió a conjuntos de la talla histórica de UNICS Kazan, CSKA, Zenit, Lokomotiv… Su presencia en pista con BC Samara, además, no era testimonial, más de 20 minutos por partido, casi 6 puntos y más de 3 rebotes. Todo eso, siendo aún junior de primer año.