Lucentum se impuso al líder ACB por segunda vez consecutiva esta temporada.

RESULTADO: PAMESA VALENCIA 96 – LUCENTUM ALICANTE 101

FICHA TÉCNICA

PAMESA VALENCIA (33+18+27+18): Nacho Rodilla (18), Víctor Luengo (9), José A. Paraíso (16), Bernard Hopkins (15), Fabrizio Oberto (19) -quinteto inicial-, Pedro Robles (9), Kammerichs (2), Asier García (3), Alejandro Montecchia (5).

LUCENTUM ALICANTE (29+24+25+23): Pablo Prigioni (15), López Valera (7), Velimir Perasovic (27), Manu Gómez (-), Lou Roe (14) -quinteto inicial-, Jordi Millera (8), Oriol Junyent (17), Héctor García (9), Víctor Baldo (4).

Incidencias: partido correspondiente a la final de la Copa Generalitat Valenciana, disputada en el .

Arbitros: Murgui, Ortega y García Leal. Sin eliminados.

26/01/2003 – Pabellón Francisco Laporta de Alcoy. Asist: 1800 espectadores.

CRÓNICA

Partido que se preveía de cierta tensión, por cuanto Pamesa había ganado las 4 ediciones anteriores de este trofeo, y Lucentum le tiene tomada la medida a los valencianos, a los que ganó en liga tanto esta temporada como hace dos años. Era posible baja Oriol Junyent, que sufrió un desfallecimiento el viernes -incluso fue hospitalizado-, pero finalmente se vistió de corto e incluso demostró al seleccionador que su no convocatoria puede ser un error.

El primer cuarto fue de baloncesto de ataque: no existieron las defensas. Oberto, Paraíso, Rodilla, Roe y Perasovic intercambiaban canastas y porcentajes a cuál mejor. Sin embargo, las rotaciones del segundo cuarto favorecieron a Lucentum, cosa harto curiosa, pues Pamesa se supone que tiene mejor banco. Tanto Millera como Oriol Junyent superaron claramente a sus defensores y lograron que Lucentum llegara al descanso con una ventaja, ínfima por un triple final de Robles: 51-53.

Tras el descanso, más triples

Paco Olmos puso en cancha a toda su artillería, pero los triples siguieron mandando: Héctor y Asier García, Montecchia, Velimir intercambiaban canastas lejanas sin que el juego interior tuviera mayor trascendencia. El último en sumarse al festín fue el argentino Pablo Prigioni, que con una de sus bombas consiguió cierta ventaja para Lucentum, que Pamesa ya no pudo enjugar.

LA CLAVE: el triple de Pablo Prigioni en el último cuarto, que rompió definitivamente la resistencia valenciana.

LA FIGURA: Oriol Junyent, que venía de una mala semana: había bajado sus números, no había sido convocado para la selección como era habitual, y sufrió un episodio de desmayo el viernes. Se sobrepuso y junto a Roe fueron mucho mejores que los pívots valencianos.