A algunos, los menos, no les gustó su regreso al Estudiantes por su última etapa en la Madrid. Otros, recibieron con agrado el fichaje por parte de la entidad colegial de un jugador que quizá no sea el mismo de antaño, uno de los protagonistas de aquel Estudiantes subcampeón de liga, pero que es capaz de seguir aportando mucho a la plantilla dirigida por Luis Casimiro. Lo ha demostrado en los dos últimos partidos. A nadie se le escapa que Iturbe tiene una mano sensacional y sin embargo, las dos pasadas jornadas ha hecho gala de un gran acierto y una capacidad para asumir tiros que se antoja muy necesaria tanto para él, como para su equipo.

Frente al Joventut, agarró una racha mágica que a más de uno nos hizo levantar del asiento. Uno tras otro Iker Iturbe logró cinco triples en los primeros cinco minutos del segundo cuarto. Acabó con un total de seis aciertos desde la línea de tres, insuficiente estadística para conducir a su equipo a la victoria. Ayer, algo cambió De nuevo apareció la muñeca del vitoriano pero sus triples sí sirvieron para que los suyos se llevaran la primera victoria de la temporada. Otra vez 6/8, otra vez espectacular desde el perímetro. Iturbe está en racha. Su mejor versión de tirador parece que ha regresado.