La ACB ha informado finalmente del acuerdo alcanzado con Movistar, para ofrecer a los clientes de Movistar+ todo el baloncesto nacional: Liga Endesa, Copa del Rey y Supercopa Endesa. Con la entrada de Movistar+ en el mundo del baloncesto nacional, sus abonados tendrán la oportunidad de disfrutar de 4 partidos semanales (todos en domingo) de la liga ACB, los partidos de la Euroliga, y los ya clásicos de la NBA. Todo el baloncesto a disposición de los clientes de Movistar+.

¿Qué sucede con los aficionados no abonados a Movistar+?
El acuerdo alcanzado otorga a la operadora la exclusividad en la emisión de los partidos ACB, Euroliga y NBA (a partir de la próxima temporada) hasta la finalización de la 2017-2018. Para la actual temporada, compartirá los derechos de emisión con Teledeporte, que tendrá prioridad de elección de 1 partido semanal. Será la primera vez en la historia del baloncesto nacional que suceda.

¿Un buen acuerdo?

Como sucede con cualquier decisión, se ha generado mucha controversia con la apuesta de la ACB por Movistar+, que priva a muchos aficionados al deporte de la canasta (que no quieren/pueden pasar por caja) de sus rutinas televisivas de los últimos años, ya fuera desde TVE, Teledeporte o las televisiones autonómicas, algunos periodistas muy reconocidos a nivel autonómico como Jordi Robirosa en Cataluña, ya han lamentado de la desparición del baloncesto en TV3 después de más de 30 años.

Pero como sucedía con las cintas de cassette, esta decisión tiene 2 caras:

– La cara A: Hay quien opina que esta decisión es muy positiva para la ACB. Movistar+ asegura retransmisiones en HD, su visionado en múltiples dispositivos, previos y post partido, y una atención especial al deporta de la canasta, del que ha habido muchas quejas en los últimos años.

El equipo encargado de las retransmisiones es de sobras conocido: Daimiel, Carnicero, Locar o Valdemoro. En definitiva, gente de baloncesto.

Se pretende modernizar el baloncesto y equipararlo con el trato que reciben otros deportes como el futbol, Moto GP o la F1. ¿La calidad se paga?

Y luego evidentemente están las razones económicas: entre patrocinio y los derechos de televisión, la ACB ingresará más de cuarenta millones de euros. Un bocado espectacular y completamente irrechazable para una organización cuyos componentes, en no pocos casos, están viviendo un momento económico complicado.

– La Cara B: Por el contrario, muchos aficionados al baloncesto protestan por tener que pagar por ver la liga ACB. Son aquellos aficionados que consideran su deporte como un interés general, y no un negocio sobre el que comerciar. ¿Una pasión que en tiempos de crisis no debería suponer un gasto más a las familias?

Son aquellos aficionados que piensan la ACB no debería pasar por las manos de un único operador, que el dinero no debería comprarlo todo, o que las televisiones públicas deberían apostar con mucha más fuerza por el baloncesto. 

La anterior experiencia con el baloncesto de pago (Canal +) no destacó ni por sus índices de audiencia ni por su cercanía con la mayoría de los aficionados.

¿Cara A o Cara B?