El Regal FC Barcelona se ha convertido en el primer semininalista de la Copa del Rey tras ganar al Real Madrid por 75 a 83 en un partido en el que el gran protagonista ha sido Juan Carlos Navarro.
El partido comenzó falto de ritmo y con el Real Madrid encomendándose a su mejor jugador, Felipe Reyes, que anoto en los primeros ataques blancos. Sin embargo, pronto apareció Ersan Ilyasova para mostrarse muy superior a su marcador, Jeremiah Massey, tanto en ataque como en defensa.
Un par de buenas acciones -finta y mate, triple- del turco fueron clave para que el Barcelona consiquiera una ventaja de siete puntos mediado el primer cuarto, lo que provocó el tiempo muerto de Joan Plaza.
Sólo la buena mano de Bullock, que sumó su sexto punto con una suspensión por encima de Sada y había superado a Navarro previamente permitía a los blancos respirar con cierta tranquilidad antes de reservarlo en el banquillo para jugar con el dúo de bases Pepe – Llull simultáneamente en la pista.
Con Llull como escolta y anotando un triple, amén de una defensa zonal que bloqueó momentáneamente al Barça, el Real Madrid se acercó en el marcador hasta los 3 puntos de desventaja, momento en el que entró en escena Fran Vázquez para recordar con un 2+1 sobre Van den Spiegel que él también estaba allí.
Pero Vázquez no fue suficiente para detener la remontada blanca, que se consumó tras dos canastas de Van den Spiegel y un alley-oop entre Pepe Sánchez y Quinton Hosley que dejaba el partido en tablas con pocos segundos del segundo cuarto disputados.
El partido se sumió en una fase más espesa. Ilyasova lo pasaba peor al ser defendido por Hervelle, los tiros no entraban y las pérdidas de balón se multiplicaron. No duró mucho, otro pase mágico de Pepe, un triple de Grimau y el regreso de Raül López impidieron que las defensas se impusieran.
El Barcelona aprovechó un momento de desconcierto tras varias decisiones arbitrales que perjudicaron a los blancos, y Navarro ponía fin a la penúltima escena del primer tiempo con un triple que dejaba a los suyos 8 puntos arriba (28-36).
En los últimos minutos antes del descanso los equipos mostraron sus mejores armas: Reyes volvió para mantener la ventaja mientras que Bullock y Navarro (que acabó el cuarto con 12 puntos y 7 asistencias) anotaron se superaban el uno al otro cada vez que tocaba atacar.
Nada más comenzar el tercer período la ventaja azulgrana se incrementó, en buena parte gracias a la aportación de Ersan Ilyasova, que se convirtió en una amenaza constante para el aro blanco.
El partido se estaba rompiendo, un triple de Basile hizo que la barrera de los 10 puntos se rompiese (47-59), y con el Barça dispuesto a marcharse definitivamente apareció Bullock, que en sociedad con Reyes y gracias a un triple y un tres mas uno apretó el marcador una vez más (58-61) para dejar el partido abierto antes del último período.
Van den Spiegel seguía poniendo piedras para evitar que los de Xavi Pascual resolvieran antes de tiempo, mientras que los triples (los anotados y los fallados) de Basile imponían al Barça un ritmo irregular que fue aumentado con el apoyo de Navarro desde más allá del arco (tres triples casi consecutivos, el Barça 13 por delante). ¿Definitivo?
Felipe con su tiro de media distancia y una inteligente defensa que le permitió sacar una falta de ataque a Ilyasova acortó distancias, y un ataque muy duro (hasta 3 faltas hizo el Barça en él) fue culminado con dos tiros libres anotados por Hervelle ¿Por qué no una nueva remontada?
Porque esta vez Navarro estaba muy enchufado y anotó un nuevo triple que minó la moral blanca. Mumbrú y Hervelle la restañaron en parte, activando a su afición, más numerosa que en otras ocasiones, pero todo fue en vano. El Barça supo manejar el tempo del partido en los minutos finales y se convirtió en el primer semifinalista de la Copa, con Navarro ovacionado al ser sustituido a falta de 30 segundos, tras anotar 27 puntos y dar 10 asistencias.